Republicanos emiten una propuesta alterna a castigo presupuestario

Un proyecto de ley propuesto ayer por republicanos de la Cámara de Representantes para mantener el funcionamiento del gobierno el resto del año fiscal, también serviría para mitigar algunos de los impactos más duros de los recortes de gastos en todo el gobierno, que entraron en vigor la semana pasada.

Por ejemplo, la propuesta prohibiría al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos reducir la financiación a los centros de detención, donde los inmigrantes ilegales se encuentran detenidos.

Esa propuesta surgió luego de que los republicanos se enfurecieran cuando cientos de inmigrantes ilegales fueron liberados de los centros de detención, la semana pasada, en la víspera de los recortes en el gasto federal por 85,000 millones de dólares, conocidos como castigo presupuestario.

La resolución de 982,000 millones de dólares, propuesta ayer, que garantizaría que el gobierno permanezca en funciones cuando su actual mecanismo de financiación expire el 27 de marzo, también incluye dinero para asegurar que los guardias de la seguridad fronteriza no sean despedidos. Además, proveería 2,000 millones de dólares en nuevos fondos para seguridad de las embajadas, una respuesta a los atentados del 11 de septiembre del 2012 en contra del consulado estadounidense en Bengasi, Libia, en el que cuatro estadounidenses fueron asesinados.

La medida también extendería el congelar los salarios de los empleados federales, incluidos miembros del Congreso, al vetar un aumento de 0.5% programado para entrar en vigor en abril. En gran parte de la administración, la resolución mantendría fundamentalmente las prioridades de gasto en vigor desde el primer semestre del año, pero fijaría los recortes en la gestión hasta el 30 de septiembre, cuando termina el año fiscal.

Sólo el Pentágono recibiría nueva ayuda para mitigar el impacto de los recortes.

La resolución restauraría la no financiación al Ejército, que absorbió la mitad de los recortes, pero sí refleja las nuevas prioridades para el gasto militar, negociado entre los demócratas y los republicanos en la Cámara y el Senado el año pasado, que pretenden ayudar a mitigar el impacto.

Por ejemplo, la medida de la Cámara propone incorporar 10,400 millones dólares para el presupuesto operativo y de mantenimiento del Pentágono. La inyección de dólares se compensaría con reducciones en otras partes del presupuesto del Departamento de Defensa.

Está claro que esta nación se enfrenta a decisiones muy duras y le toca al Congreso allanar el camino para nuestro futuro financiero. Pero en este momento, tenemos que actuar rápidamente y tratar de sacar el máximo provecho de una situación difícil. Este proyecto de ley va a financiar programas esenciales y servicios federales; ayudará a mantener nuestra seguridad nacional, y eliminará de la mesa la posibilidad de un potencial cierre del gobierno , indicó el representante republicano Harold Rogers, presidente del Comité de Asignaciones de la Cámara, en un comunicado.