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La del 93 fue una Selección parteaguas

El delantero formó parte del Tri que jugó el torneo internacional tras un escándalo y con el mismo llegó a la final de la Copa América.

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David Patiño estaba en el límite del área, esperando sigiloso el pase de Hugo Sánchez. Era 1993, la primera participación de México en la Copa América y el primer partido de la Selección mexicana en el torneo.

Argentina era el rival y luego de una falta sobre Hugo, el delantero mandó un pase que dejó sólo a David, mientras que los argentinos se disponían a colocar la barrera para el tiro libre; a esa jugada la bautizaron como el madruguete.

Es parte de la mejor etapa de mi carrera, antes de mi lesión. Fueron los mejores años que me tocaron vivir como jugador , expresó un melancólico David Patiño.

El mediocampista fue parte de la generación de la diáspora del Tri en Copa América. Aquel equipo que de invitado, llegó a la final del torneo, ante la sorpresa de la Conmebol.

A la distancia y con el paso de los años, el mediocampista valora el logro de aquel equipo, que entre jugadores consolidados -como Hugo, Luis Flores o Miguel España- también surgió una generación con jóvenes promesas, entre ellas David Patiño.

Llegamos como invitados y con el escepticismo que siempre se tenía sobre nosotros en un torneo que no era en México. Fue una Selección que fue parteaguas porque, si bien tuvimos una primera ronda difícil, nos pudimos meter hasta la final y de ahí que los recuerdos sean muy agradables , añadió el ex jugador.

Eran los tiempos del futbol mexicano después de la suspensión por la falsificación de actas en la selección juvenil. La historia se conoce como los cachirules, habían pasado siete años desde el último encuentro de alto nivel en la categoría mayor y la inexperiencia internacional era el primer obstáculo del equipo.

Es bien sabido por todos que el mejor nivel del futbol en el continente se juega en Sudamérica. Es una confederación muy competitiva y que exporta muchos jugadores, eso lo sabíamos, que era un reto para nosotros y demostramos que teníamos el nivel competitivo de pelear con cualquier selección , expresó el que fuera mediocampista de Pumas.

Y es que en cuanto a la experiencia internacional, los mexicanos carecían de la misma. Sólo Luis García jugaba en Atlético de Madrid y nada más; sin embargo, no fue impedimento para que el equipo llegara a la final.

Desde el primer partido el equipo tuvo una actitud protagónica, de pelear con equipos que supuestamente eran superiores en individualidades. Históricamente fue el primer resultado importante a nivel mayor de la selección, fue romper los paradigmas , mencionó Patiño Oviedo.

David recordó que los rivales quedaron sorprendidos por el nivel de México y la imagen más evidente de aquel sentimiento fue el más glorioso para Patiño, en el primer partido de México ante Argentina. Todos esperaban que Hugo disparara a gol, pero me dio un pase para que yo anotara. Las selecciones más fuertes de Sudamerica no nos esperaban así , recordó el ahora técnico del equipo juvenil de Pumas.

Eso sí, aunque su participación y la de sus compañeros resultó histórica para la Selección mexicana, los problemas de promoción deportiva impidieron que emigraran a ligas extranjeras . Hubo acercamientos no sólo conmigo; además, los jugadores mexicanos, al final de cuentas, preferían jugar en México , sentenció Patiño, protagonista del primera avistamiento de México con el continente americano.

eduardo.hernandez@eleconomista.mx

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