Evite llamadas incómodas

Si su tranquilidad se ve interrumpida constantemente por las entidades financieras que le ofrecen sus productos o servicios vía telefónica o, simplemente, quiere evitar ser molestado por esta forma de publicidad, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de Usuarios Financieros (Condusef) maneja un sistema que protege su derecho a la privacidad.

Este sistema, de nombre Reus (Registro Público de Usuarios), permite que cualquier persona se inscriba a una base de datos para blindar su información ante alguna entidad financiera (bancos, aseguradoras, afores, sofoles o arrendadoras) y, en caso de que vuelva a ser molestada, la institución procede a sancionar a la entidad que infringió el sistema.

Elisa Herrejón Villarreal, directora del Desarrollo y Evaluación del Proceso Operativo de la Condusef, expresó que el Reus es un sistema que desde el 2007 funciona de manera adecuada y que permite hacer efectivo el derecho a la privacidad a los usuarios de servicios financieros.

CÓMO SOLICITAR EL REGISTRO

Usted puede llamar a la Condusef desde el número que quiera incluir en el Reus. Posteriormente, proporciona su nombre y, de acuerdo con sus intereses, puede proteger datos como su celular, su teléfono de trabajo y sus correos electrónicos. Inclusive, puede bloquear el teléfono para todos los familiares que habitan en su domicilio.

También puede acudir a cualquiera de las oficinas de atención de la Condusef en un horario de 8:30 de la mañana a 6 de la tarde para ser inscrito en dicho sistema o bien, realizar el registro de forma virtual dentro de la página de la Condusef. La página posee un link directo para inscribirse al Reus.

La institución tiene estipulado que la inscripción a este sistema no tiene ningún costo y, una vez inscrito, las entidades financieras tienen 45 días, a partir de la fecha de inscripción, para dejar de hacer llamadas que contengan publicidad de sus productos o servicios.

QUÉ PASA SI ME SIGUEN LLAMANDO

De acuerdo con Herrejón Villarreal, cuando una persona está registrada en el Reus y recibe una llamada telefónica donde se le ofrece algún producto financiero, ésta tiene que realizar una queja que se denomina aviso de infracción, el cual tiene que presentarse por escrito en las oficinas de la Condusef con datos como la fecha de la llamada y el nombre de la institución que la realizó.

En caso de que alguna institución infrinja el Reus, la Condusef podrá imponer multas que van desde los 500 hasta los 2,000 días de salario mínimo vigente en el Distrito Federal (de 30,000 a 130,000 pesos).

La especialista aseveró que la inscripción del usuario en el Reus tiene una vigencia de dos años y si el usuario se dio de alta por medio del portal de Internet de la institución, automáticamente se le informará vía correo electrónico cuando la vigencia de su registro haya terminado y se le preguntará si desea renovarlo.

Cabe mencionar que el Reus funciona solamente si se trata de publicidad telefónica, ya que se puede caer en la confusión de que también protege a los usuarios que tengan deudas bancarias.

Este servicio es nada más en caso de que le ofrezcan algún producto financiero, pues, si se trata de alguna deuda, las instituciones tienen el derecho de seguir marcando para hacer la recuperación del adeudo , indicó la funcionaria de la Condusef.

Además, explicó que la única manera de sancionar a las instituciones cuando pasen por alto al Reus es por medio de la Condusef, pues la persona afectada no puede ejercer ningún tipo de acción penal por su cuenta.

Qué es y qué debes saber del Reus:

• Es un servicio gratuito.
• Se pueden bloquear a todas las instituciones o dejar exentas sólo a dos entidades de las que se quiere seguir recibiendo información.
• Una vez registrado, se deben de esperar 45 días para dejar de recibir por completo las llamadas por parte de las entidades financieras.
• La duración del registro es por dos años.
• El aviso de infracción sólo puede ser presentado por escrito en cualquiera de las oficinas de la Condusef.
• El Reus no cubre llamadas por servicios de cobranza, llamadas con fines políticos, caridad, beneficencia y encuestadores telefónicos.

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