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Geopolítica

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Maduro no ha honrado su compromiso: Antonio Ledezma

Hoy inicia en la Ciudad de México una mesa de negociación entre representantes de Nicolás Maduro y de la oposición, con miras a las elecciones regionales de noviembre.

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Venezuelan exiled veteran opposition figure and former mayor of Caracas Antonio Ledezma wears an Order Medal Of Cruzeiro Do Sul after receiving it form BrazilREUTERS, X02151

Fausto Pretelin Muñoz de Cote

Antonio Ledezma se encuentra exiliado en Madrid, España, luego de haber sido encarcelado bajo el régimen de Nicolás Maduro acusado de conspirar. En noviembre de 2017 llevaba más de 1,000 días en cautiverio y tenía prisión domiciliaria. La noche del viernes 17 de noviembre logró escapar. El exalcalde metropolitano de Caracas habló el pasado lunes con El Economista vía telefónica sobre la mesa de negociación entre el gobierno de Maduro y la oposición.

—¿Cuáles son las expectativas de la nueva mesa de diálogo entre el régimen y la oposición venezolana que hoy inicia en la Ciudad de México?

No quisiera ser pesimista. Parafraseando a Winston Churchill, lo único útil es ser optimista. Pero las realidades son las realidades, y la realidad indica que este sería el decimoquinto diálogo. Que en los anteriores diálogos tanto Chávez como Maduro no honraron su compromiso. Y a diferencia de diálogos anteriores, en esta coyuntura vemos que los que van a dialogar supuestamente en nombre de la resistencia en Venezuela o de la oposición, van dispersos. La oposición está más desarticulada que nunca.

—¿Esto podría afectar la elaboración de la agenda que desea elaborar la oposición?

La agenda que supuestamente van a debatir ya es una agenda con puntos que han sido acordados entre Maduro y partidos de la oposición que han sido infiltrados. Por ejemplo, ya designaron un Consejo Nacional Electoral. Eso lo designaron, incluso, a espaldas de (Juan) Guaidó.

—Y aun así el equipo de Juan Guaidó ha aceptado la negociación; está en México Carlos Vecchio, gente del partido Voluntad Popular.

El equipo de Juan Guaidó juega para los dos lados. Por una parte, el llamado G4, que es el que ha venido controlando los pasos de Guaidó, es el que se está entendido a su vez con Maduro, por lo menos algunos de sus miembros: ahí hay gente de Primero Justicia como Henrique Capriles que abiertamente ha dicho que a Guaidó ya le pasó su tiempo.

—Henrique Capriles, el político que contendió por la presidencia contra Maduro en 2013, y al que posiblemente le cometió un fraude, ocho años después, ¿está más cerca de Maduro que de Guaidó?

Vemos que Capriles aboga más por el cese del Gobierno interino de Guaidó que por el cese de la usurpación de Maduro. Hay políticos que ya están abiertamente en campaña para las elecciones regionales: gente del (partido) Un nuevo tiempo, gente de la llamada Acción Democrática y qué decir de los llamados alacranes, infiltrados que son activistas que se han alineado a la estrategia de Maduro.

—¿Quiénes componen el llamado G4?

El G4 lo integran los siguientes partidos: Primero Justicia, donde están Capriles y Julio Borges; Un nuevo tiempo que dirige el excandidato presidencial Manuel Rosales; Acción Democrática, una de sus mitades porque hay otra que está abiertamente jugando con Maduro, que es la que lidera Henry Ramos Allup, y Voluntad Popular de Leopoldo López.

—Bajo este contexto, ¿gana más Maduro que la oposición?

Maduro gana tiempo y (la oposición) desconcierta a la comunidad internacional porque muchos en el mundo se estarán preguntando: “cómo en Venezuela, donde hay una narcotiranía, perpetradores de crímenes de lesa humanidad, gente por la que piden 15 millones de dólares por su captura (en referencia a la justicia de Estados Unidos que busca a Nicolás Maduro y a parte de su cúpula), y pese a ello los llamados líderes de la oposición se van a prestar para participar en unas elecciones”. Es un dato inexplicable.

—En julio pasado presentó en Madrid su libro “¿De dónde venimos y a dónde vamos?” ¿Qué propone para salir de la crisis venezolana?

Propongo dos planes para Venezuela: un plan Marshall para que se reconstruya la economía que se ha desplomado en más de 85 puntos de PIB; para renegociar la deuda externa que supera los 175,000 millones de dólares; para busca capital que nos ayude a levantar el aparato productivo y a vencer la hiper inflación.

También propongo un plan como el Plan Colombia que impulsó Andrés Pastrana y Álvaro Uribe. En Colombia sirve para desmontar el andamiaje del narcotráfico, en Venezuela sería para desmantelar la corporación criminal.

Maduro señala que las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea son causa de la crisis venezolana.

(En el libro) hago un análisis para poner en su justo lugar cuáles son las causas de esta catástrofe humanitaria desmontando la queja de Maduro de que las sanciones son la causa de la hambruna y de la crisis de servicios. Eso es absolutamente falso. El único responsable es el modelo populista, el modelo anacrónico llamado Plan de la Patria. Un plan concertado por Chávez con Cuba.

Nicolás Maduro anunció ayer que en la mesa de negociación participará su hijo Nicolás Ernesto, sancionado por los Estados Unidos.

El equipo de Juan Guaidó juega para los dos lados”.

Antonio Ledezma, exalcalde metropolitano de Caracas, exiliado en Madrid

fausto.pretelin@eleconomista.mx

Fausto Pretelin Muñoz de Cote

Fue profesor investigador en el departamento de Estudios Internacionales del ITAM, publicó el libro Referéndum Twitter y fue editor y colaborador en diversos periódicos como 24 Horas, El Universal, Milenio. Ha publicado en revistas como Foreign Affairs, Le Monde Diplomatique, Life&Style, Chilango y Revuelta. Actualmente es editor y columnista en El Economista.

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