Lectura 2:00 min
Proponen en Colombia aumento de más del 10% al salario mínimo
Inició el debate para definir el alza que tendrá el salario mínimo en Colombia en 2024. Desde el Ministerio de Hacienda, aseguran que se debe tomar en cuenta la inflación que se mantiene a doble dígito; gremios y analistas señalan que aún es muy pronto para definir en cuánto quedará el sueldo base.

El salario mínimo actual en Colombia asciende a 1,160,000 pesos colombianos (292 dólares, aproximadamente). Si se materializa el aumento del 10% que se propone, en 2024 ascendería a 1,276,000 (321 dólares).
Como cada año, la discusión del incremento del salario mínimo en Colombia se toma la opinión pública nacional en los últimos meses, pero el debate para el monto de la vigencia 2024 comenzó más temprano de lo previsto.
Todo empezó con una declaración hecha por el viceministro de Hacienda, Diego Guevara, quien dijo que “el Gobierno no tiene dudas de que el incremento del salario mínimo estará en dos dígitos”.
Esto, según Guevara, teniendo en cuenta la trayectoria de la inflación en lo que va del último año, y de que los colombianos que dependen de este monto fijo no pierdan su poder adquisitivo.
José Ignacio López, director ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, aseguró que, más que una propuesta, es una clara pincelada de que el Gobierno espera un dato de la inflación más alto de lo contemplado previamente.
Estimamos que la inflación este año cierre en 9.5%, muy cercana a doble dígito y, por lo tanto, si se le agrega algo de productividad y algunos otros elementos, fácilmente llegamos a la cifra de doble dígito. Ojalá el Gobierno sea un poco más precavido y trate de mantener el incremento ceñido al IPC ”.
El último dato de inflación entregado por el Dane se sitúa en 11.75%, y acumula cinco meses de leves reducciones.
“Las empresas trasladan a sus consumidores este aumento del costo salarial, y otro incremento tendría una segunda ronda inflacionaria y, si la demanda en algún momento no permite trasladar este precio a los consumidores, lo que vamos a tener es un mercado laboral más débil con aumento de la informalidad”, complementó López.
Carolina Monzón, gerente de Investigaciones Económicas de Itaú, aseguró que “habrá que ser conscientes qué espacio de negociación en realidad tienen los empresarios en un escenario donde la actividad se ha desacelerado de manera significativa”.
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, dijo que también debe tenerse en cuenta el proyecto de reforma laboral. “Creo que se requiere ser demasiado cauteloso, antes de pensar en cifras estrambóticas. También se debe tener en cuenta lo que pase con el proyecto de la laboral”.
Por otro lado, Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, mencionó que generar expectativas de aumentos altos del salario mínimo “puede ser contraproducente porque genera un piso político para la negociación”.