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Mexicanos de todos los ingresos son impactados por la inflación: Nielsen
Productores ofrecen un menor gramaje del producto para que el traslado de precios no sea tan brusco.

La inflación ha sido tan persistente y transversal que hasta los mexicanos de altos ingresos actúan con una mentalidad de ahorro, lo que no se había visto en las crisis más recientes del 2009, la provocada por el terremoto del 2017 y la del año del Covid (2020), advirtió Yanira Reyes, Customer Success Leader de Nielsen IQ en México.
Si bien identifica a las familias más vulnerables como las que resienten con más fuerza el alza consistente de los precios, reconoce también que desde el segundo trimestre del año, las familias de mayores ingresos comenzaron a cambiar patrones de compra para optimizar sus ingresos.
Entrevistada por El Economista, reconoce que ante la escalada de precios de alimentos, considerados básicos, 40% del gasto de los mexicanos se destina a este rubro.
Claramente no es que se compren más alimentos. Las familias ocupan un mayor porcentaje de gasto, por el incremento de precios, en la compra de alimentos como tortillas, aceite, granos y cereales, refirió.
Apoyándose en análisis y encuestas que ha levantado la firma, dice que las familias que cuentan con mayor disponibilidad de recursos están optando por comprar productos de mayor tamaño que ofrecen mayor rendimiento.
En tanto, los hogares más vulnerables comenzaron a migrar hacia marcas menos conocidas que ofrecen precios más asequibles así como a marcas blancas o libres, que mostraron un crecimiento hasta de 30% en las compras.
Tal como ha sucedido en crisis anteriores, o como fue el caso tras el terremoto del 2017 en la Ciudad de México “encontramos una disposición de compra para apoyar marcas locales, particularmente se observa empatía hacia sectores vulnerables, como los agricultores.
Ante la expectativa del Banco de México de que la inflación llegará al objetivo hasta el 2024, la experta subrayó que “los mexicanos continuaremos con los bolsillos presionados de aquí a ese momento”.
Limitan salidas de casa
La experta de Nielsen IQ explicó que en la firma no tienen una medición como tal sobre el impacto que ha tenido la inflación en la asistencia de la gente hacia restaurantes, taquerías, y fondas.
Pero admitió que hay una mayor disposición de las familias para seguir consumiendo dentro del hogar y una tendencia a reducir gastos fuera de casa, lo que también incluye el entretenimiento. Ya no es tanto por cuestión de salud, sino por ahorro ante la escalada de precios, resaltó.
De acuerdo con los datos del Inegi, los precios de servicios de restaurantes y hoteles registraron una variación anual de 10.91% en agosto. Con esta fluctuación, sumaron 29 meses al alza y fuera del rango superior de variabilidad.
Reducción de tamaños
Reyes reconoció que en periodos de crisis económica o de elevada inflación es común en la industria de consumo masivo que los fabricantes asuman una estrategia que les permite acotar el traslado de los costos al consumidor final, a esta práctica se le conoce como downsizing.
Para mantener los precios al consumidor, o incrementarlos en la menor medida posible, ofrecen un menor gramaje del producto para que el traslado de precios no sea tan brusco.
Toma el ejemplo de los precios de alimentos que han registrado variaciones hasta de 20% anual, para advertir que sin estrategias como el downsizing, sería muy complejo el traslado de precios al consumidor final.

