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Acuerdo fallido en el Congreso
Los 12 miembros del Congreso reconocieron su incapacidad para lograr un acuerdo para reducir el déficit, lo cual podría resolverse hasta 2013.
Washington.- Los legisladores de Estados Unidos abandonaron su esfuerzo para frenar la enorme deuda del país el lunes, en una señal de que probablemente Washington no será capaz de resolver una disputa sobre los impuestos y el gasto hasta el 2013.
Integrantes demócratas y republicanos de una "supercomisión" de 12 miembros del Congreso, dijeron que no fueron capaces de resolver sus significativas diferencias, mientras corrían para alcanzar una fecha límite de entrega de un plan que podría recortar los déficits de Estados Unidos en al menos 1,2 billones de dólares en 10 años.
"Luego de meses de arduo trabajo y duras deliberaciones, hoy hemos llegado a la conclusión que no será posible lograr ningún acuerdo bipartidista disponible al público antes de la fecha límite de entrega del panel", dijeron la senadora demócrata Patty Murray y el representante republicano Jeb Hensarling en un comunicado conjunto.
No es probable que el anuncio impulse a las agencias calificadoras de crédito a rebajar la nota de la deuda de Estados Unidos, porque recortes automáticos en el gasto tienen fecha para comenzar ahora que el comité ha fracasado.
Standard & Poor's aseguró que la calificación crediticia de Estados Unidos no se ve afectada por el fracaso de la "supercomisión".
El panel esperó hasta después del cierre de los mercados de Estados Unidos para declarar formalmente que el esfuerzo estaba muerto, pero las acciones en Wall Street alcanzaron un mínimo de un mes debido a los temores de una deuda gubernamental fuera de control en Europa y Estados Unidos.
El fracaso de la comisión fija un año de incertidumbre sobre impuestos y gastos que podría seguir haciendo ruido en los inversores.
Probablemente el Congreso se embarque en otra ronda de política arriesgada en las próximas semanas, mientras los demócratas luchan por extender medidas de impulso a la economía como un recorte de impuestos a las nóminas y ampliar beneficios a desempleados que expirarán a fin de año.
Los republicanos se han comprometido a blindar el gasto militar del recorte automático de gasto y también intentarán mantener bajas tasas de impuestos a los más adinerados antes de que suban a finales del 2012.
El representante republicano Buck McKeon, que preside el Comité de Servicios Armados de Cámara de Representantes, no pudo esperar hasta que la supercomisión declarara el fracaso antes de anunciar que introduciría una legislación para evitar el recorte en gasto militar.
Es probable que no tenga la simpatía de los demócratas, cuyos preciados programas de beneficios de salud y retiro son en gran medida salvados por los recortes.
Los legisladores estarán menos dispuestos a comprometerse mientras cambian su atención a las elecciones presidenciales de noviembre del 2012 y del Congreso.
El presidente Barack Obama ha mantenido su distancia de estas conversaciones, escogiendo en vez enfatizar un paquete de creación de empleos que ha sido bloqueado por los republicanos. Los asesores creen que será capaz de usar el fracaso de la supercomisión para tildar de obstruccionistas a los republicanos durante su campaña de reelección del próximo año.
klm
