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GMC Canyon, a prueba
La nueva generación de GMC Canyon establece el punto de referencia para el segmento de pick-ups medianas por factores como sus capacidades de carga y arrastre, innovaciones en el aspecto mecánico y de conectividad.
GMC Canyon Denali. Foto EE: Marcos Martínez
Como verás, su apariencia tiene un atinado equilibrio entre un vehículo para la aventura, pero sin perder la postura de uno de trabajo que no le rehuye a cargar y a remolcar.
Cuenta con dos versiones, Denali y AT4, y cada una de ellas ofrece una orientación específica para un tipo de cliente.
Debajo del cofre, Canyon está propulsado por un motor turboalimentado de 2.7 litros que desarrolla 310 caballos de potencia y 430 lb-pie de torque. Esta planta de poder está asociada a una transmisión automática de ocho velocidades.
Pasión Off Road
En una ruta exigente comandada por Bosco’s Camp 4x4, que pocos se atreven a recorrer por su complejidad y obstáculos, la GMC Canyon Denali fungió como vehículo líder en la Huasteca Potosina, al noroeste del estado de San Luis Potosí. Esta prueba sirvió para comprobar sus capacidades más allá de lo que mostró en la ciudad y caminos asfaltados.
En la primera parte del recorrido, partiendo de la Ciudad de México rumbo a Tamasopo, en San Luis Potosí, tuvo un desempeño positivo, aun cuando cargo con 650 kilos de peso en la batea, entre equipo y herramental para ruta.
El motor turbo no sufrió de fatiga y debido a la ventaja del tipo de aspiración, ofreció la confianza y rapidez para enfrentar un adelantamiento o recuperación al circular por autopista.
En este terreno también desplegó cada una de las asistencias de seguridad con las que cuenta y que son comunicadas al piloto, como la vibración del asiento del conductor cuando abandonamos el carril, el sistema de pre-colisión y aproximación, la alerta de tráfico cruzado o el asistente de colisión frontal con frenado de emergencia si se circula a menos de 80 km/h, entre otros. A ello se suman 6 bolsas de aire; head up display o el asistente de detección frontal de peatones y ciclistas.
Pasión sin límite
Entrando a la ruta 4x4 con un clima adverso debido al remanente que dejó el Huracán Otis categoría 5, los ríos y caminos de lodo de la región fueron arrasados casi por completo por las lluvias, por ello al transitarlos por mas de 23 kilómetros fue necesaria la navegación GPS (Geographic Position System).
Desde el primer kilómetro activé el modo 4 low (reductora). Así enfrenté más de 12 cruces de río cuya profundidad en algunos casos superó el metro con diez centímetros. Aquí fue determinante la altura de la suspensión y sus elementos como los amortiguadores Heavy Duty, la barra estabilizadora y el esquema independiente con resortes en el eje trasero.
En el apartado del sistema 4x4 tiene las modalidades 2H, 4High, Auto, y 4Low (reductora), bloqueo de diferencial trasero automático, perilla con modos de manejo (terreno, todoterreno ,normal, remolque/arrastre), kit de suspensión 2” arriba, ganchos de recuperación frontales en color rojo y 10 cámaras incluyendo la “Underbody camera” (cámara de visión para la parte baja).
GMC Canyon Denali puede arrastrar hasta 3,493 kg y cargar en la batea hasta 744 kilogramos.
En el interior el ambiente es de corte premium debido a los materiales que emplea y al nivel de acabados. La pantalla de infoentretenimento es de 11.3” mientras que el cluster de 11” es totalmente digital. Se suman el head up display de 6.3”, techo panorámico, sistema de sonido Bose con 6 bocinas y un amplificador. En conectividad y asistencia remota también está equipada con OnStar y Google Assistant.
En conclusión, Canyon de GMC es una pick-up premium muy ágil, con gran torque (fuerza) para salir bien librado de los obstáculos, cómoda en el interior y con gran avance tecnológico.
Ficha técnica
Motor: 4 cil, 2.7l, Turbo
Potencia: 310 hp
Torque: 430 lb-pie
Transmisión: Aut 10 vel.
Precio: 1,199,400 pesos.
