Lectura 2:00 min
Eliminar regímenes especiales alteraría actividad económica
El proyecto de reforma plantea que la permanencia de los regímenes especiales debilita y complica significativamente la estructura y diseño del principal impuesto directo del sistema tributario.
La desaparición del régimen especial de fiscalización para el sector minero y las ventas a plazo, como lo indica la iniciativa de reforma hacendaria propuesta por el Ejecutivo, alteraría la actividad económica en dichos sectores, consideran fiscalistas.
El proyecto de reforma plantea que la permanencia de los regímenes especiales debilita y complica significativamente la estructura y diseño del principal impuesto directo del sistema tributario (el ISR), a la vez que vulnera el principio de equidad horizontal .
Sin embargo, dichos tratamientos preferenciales son necesarios para la sustentabilidad económica de sectores como la minería, sostuvo Herbert Bettinger, director de Bettinger Asesores.
La eliminación del régimen especial es un error que puede frenar el desarrollo del sector minero, porque lo vas a obligar en épocas flacas y gordas a tomar una depreciación que en muchos ejercicios no tenga forma de hacer , argumentó el fiscalista.
Precisó que la minería se caracteriza por presentar ciclos de abundancia y pobreza, por lo que impedir que recupere sus gastos preoperativos en los periodos negativos afectará las inversiones y el desarrollo del sector.
COMPLICAN A MINORISTAS
En tanto, el socio de Impuestos de la consultoría pwc, Pedro Carreón, consideró que la eliminación del régimen de ventas a plazo obliga (a las minoristas) a pedir préstamos para pagar un impuesto sobre una ganancia que aún no obtienen .
Las empresas de este sector otorgan préstamos de largo plazo y obtienen sus ingresos por ventas tras dicho periodo, de un año, por ejemplo. Cobrarles impuestos al momento de la venta complica las finanzas de estas compañías, pues es cuando también deben pagar a los proveedores sin los ingresos generados por los clientes, explicó Carreón.
De acuerdo con Bettinger, las condiciones actuales de la ley para el nicho de ventas a plazos, son las correctas, pues no se está tomando una ventaja más allá de lo que efectivamente es su posición económica , de modo que las empresas pueden diferir sus contribuciones para el periodo en que obtienen el flujo correspondiente a los pagos.
manuel.lombera@eleconomista.mx