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Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales aumenta sus herramientas
El SATIF, administrado por la Conabio, proporciona diariamente los puntos de calor, que a su vez aportan un panorama diario la distribución espacial y temporal de los incendios forestales activos en México, sur de Estados Unidos y Centroamérica a diversas instancias, como: instituciones de gobierno a nivel federal, estatal y municipal; a universidades, institutos de investigación, asociaciones civiles y particulares.
Foto: Conabio.
De enero a finales de noviembre de 2022 se registraron 6,702 incendios forestales en 32 entidades federativas, esto implicó una superficie de 717,805 hectáreas, la cantidad más grande registrada en 24 años. De ellas el 94 % correspondió a vegetación en los estratos herbáceo y arbustivo, el 6 % arbóreo. Las posibles causas de los incendios en México se dan, en primer lugar por actividades ilícitas (Cambio de uso de suelo, políticas agrícolas ganaderas y de ocupación poblacional) con el 30.23%, actividades desconocidas, 24.66% y actividades agrícolas con el 19.76%, las demás se distribuyen entre actividades pecuarias, fogatas, fumadores, formas naturales, cazadores, quema de basureros, entre otras.
Las entidades federativas con mayor presencia de incendios fueron: México, Jalisco, Ciudad de México, Michoacán, Chihuahua, Chiapas, Puebla, Durango, Veracruz y Guerrero, que representan el 77 % del total nacional. Las mayores superficies consumidas se encuentran en Guerrero, Durango, Jalisco, Chiapas, Chihuahua, Nayarit, Oaxaca, Sonora, Tamaulipas y Coahuila, que representan el 81 % del total nacional.
Con la cantidad de incendios en aumento se vuelve fundamental fortalecer los sistemas de monitoreo, es decir, métodos de protección para dominar incendios de acción rápida evitando la propagación en áreas de gran riesgo, tal es el caso del Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales (SATIF), que funciona desde 1998, pero que este 2022 fue actualizado. Ahora incluye una sección de estadísticas y productos como mapas de frecuencias de áreas quemadas, así como el índice de amenaza a la biodiversidad por incendios forestales.
En 1998, luego de una temporada intensa de incendios en México, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) fue pionera en el uso de la tecnología de observación de la Tierra para detectar y monitorear el fuego activo, y proporcionar la información oportuna, en tiempo casi real, a las instancias responsables de la atención de los incendios en México, sur de Estados Unidos y Centroamérica.
Los incendios forestales son fenómenos que han sido parte de los procesos naturales de los ecosistemas, sin embargo, las modificaciones en su frecuencia, extensión e intensidad representan una amenaza para la biodiversidad. Dada la importancia de este fenómeno, la Conabio también desarrolló en 1999 el sitio web del SATIF, desde entonces realiza el monitoreo de los incendios forestales por medio de técnicas de percepción remota.
¿Cómo funciona la predicción de incendios?
Este sistema de alerta para incendios tiene como objetivo generar y proporcionar geoinformación derivada de datos satelitales que contribuye a conservar la biodiversidad y a salvaguardar la vida humana. El Sistema se integra por tres componentes principales: Sistema de recepción de imágenes satelitales, Sistema de monitoreo y análisis, y el Sistema de información, distribución y sitio web. El sitio web del SATIF es el principal mecanismo de comunicación con los usuarios.
En la actualidad se realiza el monitoreo de puntos de calor, a partir de imágenes satelitales de tres sensores: MODIS, VIIRS y ABI (por sus siglas en inglés), en colaboración con el Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Para la detección de puntos de calor (fuego activo) diariamente se procesan alrededor de 16 imágenes de MODIS y VIIRS a través del Sistema de Recepción de Imágenes Satelitales (SRIS) de la Conabio.
El SATIF proporciona todos los días los puntos de calor y un modelo de humedad del combustible muerto (elaborado con datos satelitales MODIS y Global Precipitation Measurement mission (GPM) antes de las 8:00 de la mañana, así como compuestos del índice de la humedad en la vegetación (NDVI, por sus siglas en inglés) cada diez días, obtenidos de las imágenes satelitales MODIS que se reciben en el Sistema de Recepción de Imágenes Satelitales. Esta información es utilizada por el Sistema de Predicción de Peligro de Incendios Forestales (SPPIF) que opera la Comisión Nacional Forestal (Conafor) para la estimación de peligro de incendios forestales en México.
La información de puntos de calor que genera el SATIF es enviada diariamente a aproximadamente 500 usuarios en forma personalizada, de los cuales, alrededor de 400 son usuarios de México y el resto pertenecen a países de Centro América. Los usuarios de México incluyen a diversas instituciones como Conafor, Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Protección Civil, y Bomberos, tanto de oficinas centrales como locales, así como de autoridades municipales.
Otros usuarios son universidades, institutos de investigación, asociaciones civiles y particulares que van desde empresas de comunicación, medios informativos, ingenios azucareros, consultoras, y el público general.
Proyectos de la Conabio, en incertidumbre
Este proyecto tiene como objeto reforzar el programa de manejo del fuego en el país, en este sentido los compromisos de la Conabio para apoyar son el intercambio de información y monitoreo, fomento al desarrollo de la investigación científica y tecnológica, apoyo en la coordinación para la implementación de programas relacionados y capacitación, se comprometieron también a entregar productos actualizados de monitoreo de puntos de calor, imágenes satelitales, entre otros.
Sin embargo, hoy la Conabio atraviesa por severos cambios que ponen a la institución en la incertidumbre. Fue creada por acuerdo presidencial el 16 de marzo de 1992. Hasta hace poco se trataba de una comisión intersecretarial de carácter permanente y su propósito era generar la inteligencia que necesita el país para fundamentar políticas públicas y decisiones de la sociedad sobre biodiversidad.
El pasado 30 de noviembre, durante la comparecencia de la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, María Luisa Albores González, se dio a conocer que, aunque la Conabio no desaparece, ahora se integrará como una nueva unidad administrativa de la Semarnat.
Aunque lo dicho por la funcionaria contrasta con el punto de vista de los especialistas en biodiversidad y políticas públicas, aseguró que las actividades que se han realizado durante los 30 años de existencia “continuarán y se fortalecerán”.
De entrada explicó que derivado de la renuncia del Dr. José Sarukhán se nombró como encargado de carácter honorífico al Dr. Daniel Quezada Daniel, titular de la Unidad Coordinadora de Vinculación Social de Derechos Humanos y Transparencia. Dijo que el encargo es sin pago de sueldo ni remuneración, lo que para el gobierno significa “un ahorro en 2022”.
Esto ha generado preocupación por parte de la comunidad enfocada a la biodiversidad en el país, quien ha manifestado que “ahorrar” en un tema tan delicado, dejarlo sin recursos y sin una figura jurídica clara, hace que proyectos como este no estén seguros en su continuidad.
Para conocer el nuevo sitio del Sistema de Alerta Temprana de Incendios Forestales se puede consultar este sitio.