Sostiene que la crisis en DH es generalizada

México vive una grave crisis de derechos humanos en un contexto de impunidad generalizada, consideró el primer vicepresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), James Cavallaro.

En entrevista para El Economista, destacó que las desapariciones forzadas son la situación más grave que vive el país, pues casos como los registrados en la década de 1970 durante la Guerra Fría permanecen impunes.

Indicó que, al igual que el relator especial de la ONU Juan Méndez, la CIDH considera que la tortura es generalizada en México. Ello tiene que ver con la naturaleza de la investigación criminal que enfoca la confesión como la reina de las pruebas y la falta de peso que tienen las evidencias técnicas.

El pleno de la CIDH dio a conocer sus observaciones preliminares sobre la visita in loco que realizó del 28 de septiembre al 2 de octubre, mediante las cuales describe a un país caracterizado por vivir una situación extrema de inseguridad y violencia. Asimismo de graves violaciones, en especial desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura; niveles críticos de impunidad y una atención inadecuada e insuficiente a las víctimas.

El efecto de la violencia y las violaciones a los derechos fundamentales es especialmente grave y desproporcionado sobre los grupos vulnerables y contra familiares de víctimas, defensores y periodistas es ejercida para silenciar las denuncias y el reclamo de verdad y justicia, y perpetuar la impunidad para las graves violaciones a los derechos humanos.

La violencia y el amedrentamiento buscan acallar las voces que más necesita México; tal como lo indicó una alta autoridad en reunión con la CIDH: A los mexicanos nos hacen falta verdades sobre nuestra propia historia y sobre nuestras propias tragedias .

senado pide no incurrir en simplificaciones

Integrantes de la CIDH pidieron a senadores avances en al menos ocho rubros con énfasis en una legislación general contra la desaparición forzada, así como un ordenamiento contra la tortura y otros tratos crueles e inhumanos.

El viernes una delegación de la CIDH se reunió con senadores encabezados por Roberto Gil, a quienes solicitaron avanzar en el fortalecimiento de los poderes judiciales en México, mejores condiciones de acceso a la justicia, protección de los derechos de las víctimas y dar seguimiento a los derechos de la niñez.

El presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Roberto Gil, destacó en un comunicado que es momento de reconocer los graves pendientes del Legislativo en la materia de derechos humanos pero pidió no incurrir en la absurda simplificación de que el Estado mexicano es fallido, pues advirtió que también es tiempo de destacar y explicar los notables avances que se han conseguido al respecto.

México es capaz de resolver sus propios problemas, desde sus instituciones, abierto siempre a la colaboración, supervisión y jurisdicción de los sistemas internacionales , opinó.

El panista agregó que la supervisión de la CIDH es importante para el fortalecimiento de las instituciones y la defensa de los derechos humanos, pero solicitó que esa función se haga con total responsabilidad y con un análisis profundo de la compleja realidad mexicana.