Super Cholita... ¡al rescate!

Hasta dónde han llegado nuestros amigos bolivianos en su afán de que alguien les ayude. En México, en realidad no nos sorprende mucho este recurso, porque siempre hemos tenido al incomparable Chapulín Colorado.

Allá tienen ni más ni menos a Super Cholita, su heroína -aunque sea- en un cómic.

Ella puede detener un cohete en el aire y eludir misiles, pero ahora Super Cholita tiene la complicadísima misión de acabar con la corrupción y la impunidad en el país andino, donde la justicia mantiene bajos niveles de credibilidad.

De ojos grandes y pestañas largas -al estilo de las historietas japonesas- Super Cholita viste como las indígenas del país: pollera colorida y mantilla.

También le gusta la fiesta, pues cada que puede baila y también se conmueve con las desventuras amorosas de sus vecinas.

Del drama a la realidad

Esta singular heroína hizo su presentación hace dos años, durante un encuentro internacional de historietas.

En la primera edición aparece el presidente Evo Morales pidiéndole ayuda para sacar el país adelante . Muy a su manera, Super Cholita, muy apurada, le responde: Lo siento, Evo pero milagros no hago , recuerda Rolando Valdez, de 34 años, el creador y guionista de la heroína.

Pero tan sui generis es la historia de Super Cholita, como la de Valdez. Un enfermero desocupado y divorciado.

Si bien el primer número de la serie tiró 500 ejemplares y el último 3,000, un número importante para una historieta en un país en el que el cómic es una moda reciente, sus ventas no le dan para vivir a Valdez.

El papá de la heroína (yo ero un heroe, como decía Capulina), se gana la vida vendiendo compactos de música pirata en una feria popular de El Alto, ciudad vecina de La Paz, una de las zonas más pobres del país.

En sus dos números más recientes, el cómic recrea hechos de la rebelión popular del 2003 que desembocaron en la caída del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, llamado popularmente El Gringo, ahora demandado en un juicio por la muerte de 63 manifestantes.

Y es que el humor no se termina. En El gringo contraataca , Super Cholita debe enfrentar a poderosos señores de la impunidad y la corrupción judicial y hasta aparece el Tío Sam, en alusión al pedido de extradición a EU donde vive Sánchez de Lozada.

Yo he sido creado a lo largo de los siglos, soy tan poderoso que ni 100 Super Cholitas podrían acabarme , le dice un poderoso señor que representa la impunidad.

Una escena que bien podría ser de cualquier país del continente, incluido México... Qué triste historia.