El hombre-niño incontrolable

La atención política está en el Senado tratando de empujar a la ley de salud (Obamacare) al abismo; en Corea del Norte con sus lanzamientos de misiles; en el fiscal especial que tratará de investigar los vínculos del presidente de Estados Unidos con Rusia. Mientras eso sucede, Donald Trump elige un par de tuits escandalosos y misóginos sobre los conductores del noticiero Morning Joe, Mika Brzezinski y Joe Scarborough.

Sarah Huckabee Sanders, vocera de Donald Trump, alegremente declaró que el presidente no permitirá ser acosado por medios liberales o élites liberales en Hollywood o de cualquier otro lugar . Pobre, el presidente es nuevamente víctima de intimidación.

Por enésima ocasión nos preguntamos si su reacción es importante o no.

Pero más allá de dudas, queda claro que los polémicos tuits del presidente no forman parte de una estrategia brillante. Él no gana nada, sobre todo cuando las encuestas no reflejan buenos números en el campo de su trabajo como mandatario.

Los políticos que ignoren las agresiones a Mika y Joe serán recordados como traidores morales. Trump no recuerda que un número de evangélicos conservadores lo apoyaron en las elecciones y su reacción en contra de los dos periodistas, no es un buen ejemplo para ellos.

Sus tuits sólo reflejan la reacción de un hombre-niño que no puede contener su agresividad.

Tiene razón el senador Ben Sasse en su tuit que escribió como reacción a los tuits de Trump: Esto no es normal .

Quien diga que Trump tiene una estrategia dirigida a fortalecer a su base, y lo hace a través de estos tipos de tuis, yo no lo creo. Su efectividad tiene un rendimiento decreciente.