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Henin, finalista del Abierto de Australia
La tenista belga, quien ha sido la gran sorpresa del torneo, superó sus propias expectativas tras vencer en la semifinal a la favorita Zheng Jie por 6-1 y 6-0.

La tenista belga Justine Henin dijo que había superado sus propias expectativas al llegar a la final del Abierto de Australia tras demoler a la china Zheng Jie.
La belga, que juega su segundo torneo desde que regresó al tenis después de 18 meses de retiro, derrotó a Zheng por 6-1 y 6-0, y jugará la final del sábado ante la campeona defensora Serena Williams.
Esta es la primera final del Grand Slam para la ex número uno del mundo desde el Abierto de Estados Unidos 2007, cuando derrotó a la rusa Svetlana Kuznetsova.
"Llega muy temprano para mí estar en una final de Grand Slam", dijo Henin a periodistas. "Tenía poca energía en las últimas semanas. No sabía lo que iba a suceder", agregó.
La siete veces ganadora de torneos del Grand Slam no fue cabeza de serie en el Abierto de Australia porque no ha jugado suficientes torneos como para estar en el escalafón, por lo que tuvo un difícil camino hacia la final.
Henin superó en la segunda ronda a la número cinco del mundo, la rusa Elena Dementieva, tras recibir una invitación para jugar en Melbourne. Posteriormente, la belga tendría otras duras pruebas.
"(Hubo) un sorteo duro (...) Ha sido muy presionante", dijo Henin.
La belga, quien se ha quejado de la fatiga durante el torneo, fue implacable en su triunfo ante Zheng, donde ganó 12 juegos consecutivos para sellar la victoria en 51 minutos.
Demasiado emocional
La belga dijo que tenía que controlar sus emociones antes de la semifinal.
"Yo sabía que podía ser un partido peligroso. Una semifinal del Grand Slam siempre es muy especial, porque es lo último antes de la gran final", comentó Henin.
"Especialmente en mi situación. Yo estaba muy entusiasmada con la posibilidad de estar en otra final de Grand Slam. Yo sabía que tenía que ser muy cuidadosa. Hice mi trabajo perfectamente bien", agregó.
Murray espera que Federer sea su oponente
Andy Murray está a una victoria de lograr lo que ningún británico ha podido hacer en más de 70 años: ganar un título individual masculino en un torneo de Grand Slam.
Murray derrotó el jueves 3-6, 6-4, 6-4, 6-2 al croata Marin Cilic y el domingo disputará la final del Abierto de Australia. Su rival será el ganador de la semifinal entre Rogger Federer, tres veces ganador de este torneo, y el finalista francés de 2008 Jo-Wilfried Tsonga.
Si Federer gana será una reedición de la final del Abierto de Estados Unidos de 2008 en el que el suizo derrotó a Murray en tres sets. Esa fue la única final de un Grand Slam para el británico de 22 años.
Ningún hombre británico ha ganado un major en sencillos desde 1936.
Murray espera que Federer sea su oponente el domingo en la arena Rod Laver.
abp