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“Que no me vayan a decir que los sueños no son reales”: Gonzalo Celorio
Después de saberse ganador del Premio Cervantes 2025, el séptimo mexicano en la historia del máximo galardón para el conjunto de obra literaria en lengua castellana, el novelista, ensayista y académico mexicano conversó con El Economista sobre su interés por la identidad y la memoria.

Gonzalo Celorio, escritor mexicano.
Para el escritor, ensayista y académico mexicano Gonzalo Celorio hoy fue un día de permanecer en casa, pero no para el descanso. En cambio, ha sido quizás una de las jornadas más ajetreadas pese a las limitaciones motrices y de habla que le han aquejado en los últimos años*.
La razón, un bomberazo –un imprevisto de trabajo, término común en la jerga periodística–, pero por un motivo de celebración: el Ministerio de Cultura de España anunció este lunes la concesión para Celorio del Premio de Literatura en Lengua Castellana Miguel de Cervantes por “la excepcional obra literaria y labor intelectual con la que ha contribuido de manera profunda y sostenida al enriquecimiento del idioma y de la cultura hispánica”.
Celorio se la ha pasado todo el día respondiendo mensajes y llamadas provenientes de ambos lados del Atlántico. Son las seis de la tarde y el nacido en la Ciudad de México en 1948 –hoy oficialmente convertido en el séptimo mexicano titular del máximo galardón para el conjunto de obra literaria en lengua española– ha pasado de largo la hora de la comida y apenas ha podido terminarse una quesadilla.
En sus libros, agregó el jurado del Cervantes esta misma mañana, “resuenan la ironía, la ternura y la erudición, trazando un mapa emocional y cultural que ha influido en generaciones de lectores y escritores. Celorio representa la figura del escritor integral: creador, maestro y lector apasionado. Constructor de un legado invaluable que honra la lengua española y la mantiene viva en su forma más alta: la de la palabra que piensa, siente y perdura”.
Atiende esta enésima entrevista desde su casa en San Nicolás Totolapan, un pueblo antiquísimo al sur de la capital mexicana. Hasta allí se han desplazado varios fotógrafos que esperan por retratar al celebrado. Celorio se disculpa en varias ocasiones durante la conversación, para interrumpirla, porque su teléfono no deja de sonar.
“La novela amplía las escalas de la realidad”
En el epígrafe de su libro “Mentideros de la memoria”, Gonzalo Celorio citó los últimos tres versos el poema “Cambridge”, de Jorge Luis Borges: “Somos nuestra memoria;/ somos ese quimérico museo de formas inconstantes,/ ese montón de espejos rotos”.
Y es que en gran parte de la obra literaria de Celorio habitan las historias familiares, la memoria y la identidad como las piedras preciosas, los grandes valores de la pertenencia. En muchas de sus novelas, el autor hizo protagonistas a los integrantes de su familia.
“He dedicado mi escritura fundamentalmente a escarbar en los asuntos de la identidad cultural de nuestro país, fundamentalmente, que es un país mestizo, con muchas influencias de diferente tipo, que hemos hecho nuestras y que nos definen y nos integran. De tal manera que la obra que ahora se premia (la suya) es de carácter cultural amplio, digamos, que tiene algún tipo de sustento en la propia realidad nacional y espero que alguna resonancia también”, declara el galardonado.
Asimismo, se le pregunta sobre la relación imperecedera y fecunda, también tensa y terrible, entre la ficción y la realidad.
La novela, declara el Cervantes 2025, “tiene la posibilidad de ampliar las escalas y las categorías de la realidad. Uno puede saber más de la realidad referencial a través de una novela que a través de otros discursos presuntamente más objetivos. Siempre pongo de ejemplo que sé más del medio mexicano con la lectura de Juan Rulfo que con la lectura de cualquier discurso de carácter histórico, sociológico, político o estadístico. Por ejemplo, lo que hace la obra de Rulfo es incorporar al discurso narrativo todo aquello en que los seres humanos creemos y asumimos como reales. Entonces, a mí que no me vayan a decir que los sueños no son reales, son parte de nuestra realidad, igual que nuestros anhelos, deseos, preocupaciones y deficiencias. Todo eso nos constituye y es todo lo que la novela refleja”.

“Desde muy niño, entendí que la palabra era una forma de adquisición de una identidad. Por eso he dedicado toda mi vida a la palabra literaria.”, Gonzalo Celorio, escritor
“Fue difícil abrirme paso”
Finalmente, se le pregunta al autor y actual presidente de la Academia Mexicana de la Lengua sobre su origen como parte de una familia con doce hermanos, él siendo el undécimo, con recursos limitados, y sobre cómo vivió el escalamiento hasta conquistar la pléyade intelectual mexicana.
“Efectivamente, provengo de una familia que obedecía a una especie de divisa evangélica de que hay que hay que tener los hijos que dios nos mande. Para mí, una divisa muy afortunada, porque de lo contrario no estaría aquí, platicando contigo. Fue difícil abrirme paso, en primer lugar, en el contexto familiar porque estaba regido por una actitud absolutamente igualitaria. Mi madre solía decir con mucha frecuencia: ‘todos mis hijos son iguales’, y no había manera de enfrentar una multitud de hijos si no fuera por una disciplina entre monacal y castrense (como la literatura).
“Para mí, el trabajo fundamental fue buscar mi propia identidad, para diferenciarme de ese conjunto de hermanos, y la única manera de lograrlo fue a través de la palabra. Desde muy niño, entendí que la palabra era una forma de adquisición de una identidad. Por eso he dedicado toda mi vida a la palabra literaria. Como diría Hermann Hesse, hubo que romper un mundo para salir del cascarón. También fue gracias, fundamentalmente, a una institución tan maravillosa como la UNAM, que me admitió en su seno y con la que pude obtener una formación literaria consistente, sobre todo por los maestros que me formaron, muchos de ellos, por cierto, procedentes del Exilio Español republicano”.
En la primavera de 2026, Gonzalo Celorio viajará a Alcalá de Henares, España, para recibir la máxima distinción para las letras en nuestra lengua en una ceremonia a llevarse a cabo en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá, el día en que se conmemora del nacimiento de Miguel de Cervantes Saavedra, el 23 de abril. Con este reconocimiento, recibirá la bolsa nada despreciable de 125 mil euros.
Mexicanos que han ganado el Cervantes
- 1981 – Octavio Paz
- 1987 – Carlos Fuentes
- 2005 – Sergio Pitol
- 2009 – José Emilio Pacheco
- 2013 – Elena Poniatowska
- 2015 – Fernando del Paso
- 2025 – Gonzalo Celorio
Libros clave del galardonado
Novela
- “Y retiemble en sus centros la tierra” (Tusquets, 1999)
- “Tres lindas cubanas” (Tusquets, 2006)
- “El metal y la escoria” (Tusquets, 2014)
Ensayo
- “México, ciudad de papel” (1997)
- “Ensayo de contraconquista” (Tusquets, 2001)
- “Cánones subversivos. Ensayos de literatura hispanoamericana” (Tusquets, 2009)
- “Del esplendor de la lengua española” (2016)
Memoria
- “Mentideros de la memoria” (Tusquets, 2022)
- “Ese montón de espejos rotos” (Tusquets, 2025)

