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La genómica y su participación en la economía

Buscan vincular a la academia, que realiza avances en el tema, y el sector empresarial, ?el encargado de llevarlos al mercado.

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En una década la secuenciación genómica se ha abaratado en un millón de veces y este hecho debe ser tomado en cuenta desde dos frentes: el de salud y el económico.

Se puede afirmar que la medicina genómica está abriendo una nueva era a los problemas de salud. El surgimiento de esta rama representa un cambio de paradigma para el mundo y México no puede quedarse rezagado, fueron las palabras de Julio Frenk Mora, ex secretario de Salud, durante el foro Impacto de la innovación genómica en la salud y la economía .

La reunión, que se llevó a cabo en la Academia Nacional de Medicina, tuvo como propósito establecer un panorama de vinculación entre la academia que ve avances considerables en la genómica y el sector empresarial, el cual será el encargado de llevar el terreno de la medicina al campo de la economía.

Un cambio acelerado

Hasta hace poco la medicina ponía especial atención al diagnóstico y al tratamiento como formas de resolver los problemas de salud que se iban presentando; sin embargo, con la medicina emergente apoyada en la genómica se busca predecir y prevenir.

A través de la fármaco-genómica se abren enormes posibilidades terapéuticas. Se sabe que la respuesta de un individuo a un fármaco está mediada por su estructura genética. Los estudios genómicos nos permiten anticipar la respuesta a cada uno de los medicamentos, por lo tanto individualizar y con ello maximizar la respuesta terapéutica , explicó Frenk Mora.

El también decano en la Universidad de Harvard aseguró que este tema no es importante sólo en lo individual, también para las poblaciones que constituyen el ámbito de la salud pública. Si bien es cierto que todos los seres humanos compartimos más de 99% de nuestro material genético, existen en cada gen pequeñas diferencias individuales o de grupo que explican en gran medida nuestras particularidades como individuos o poblaciones específicas, incluyendo fortalezas y debilidades .

Hace tiempo dábamos a conocer a través de este medio el descubrimiento de un gen responsable de una rara forma hereditaria de diabetes que resultó común entre los latinoamericanos; esta mutación afecta a 2% de la población mexicana y aunque ya se habían realizado estudios para indicar factores de riesgo que contribuyen a la diabetes tipo dos, la mayoría se habían encontrado en componentes genéticos de poblaciones europeas.

Explicó que casos como el anterior demuestra la importancia de contar con instituciones de investigación nacional y enfocar sus esfuerzos a poblaciones y problemas locales, pero la importancia de la medicina genómica va más allá del cuidado de la salud, tiene implicaciones fundamentales para el avance de la ciencia y tecnología, así como de la economía a través de nuevos productos y servicios .

De la investigación mercado

El doctor en economía Pedro Aspe Armella aseguró que si la investigación no se traslada al mercado se pierde la posibilidad de generar empleos y de soportar mayor crecimiento económico.

En cuanto al panorama en México, explicó que hasta hace 10 años empezamos a tener figuras que apoyen a empresas científicas y con el aumento de talento humano e investigación de las universidades, la vinculación ahora tiene más oportunidad .

Aspe Armella indicó que lo muy riesgoso es al principio, ya que es la parte donde una magnífica idea se tiene que vincular con la realidad y es ahí donde existe el mayor riesgo, por lo tanto difícilmente se encuentra un financiamiento.

Para ello, el economista explicó que una empresa tiene que financiarse con capital, no con deuda a través de bancos e instituciones financieras, esto te permite un crecimiento más sólido.

El vínculo entre universidad y sector privado es el problema básico, y el primer paso es empezar a tener contactos entre inversionistas e investigadores, dijo Aspe Armella.

En el sector público Conacyt es la parte que permite financiar proyectos en México, otra forma es a través de amigos y familiares (en Estados Unidos prácticamente 96% de las empresas exitosas comienzan así) , dijo.

También contamos con los llamados inversionistas ángeles, en México empezamos a tener alrededor de 25 empresas que están empezando a invertir en cuestiones científicas para llevarlas al mercado, ellos invierten en las primeras etapas (las más riesgosas) y generalmente apoyarán con uno a 20 millones de pesos .

Posteriormente existen los Venture, que invierten de 15 a 20 millones, y finalmente llega el capital privado que entrará con 60 a 70 millones. Pero estas empresas ya están vendiendo, ya tienen sus registros y patentes, son una empresa formal que empieza a vender 20 o 30 millones.

Por último, Aspe Armella aseguró que así se hacen empresas en México y se trata de que cada vez haya muchas más . Además dijo que se generará un compromiso de reunir a diversos investigadores con proyectos sólidos y empresarios que se encuentran en estas etapas de inversión.

nelly.toche@eleconomista.mx

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