El modelo de la canadiense Apotex

El reacomodo intensivo que vive en México el mercado farmacéutico, con nuevas necesidades crónicas, con un paciente más informado y más exigente que piensa en costos, obliga a las empresas a renovarse o morir. Las productoras, importadoras y distribuidoras de medicamentos, así como las de venta al detalle, encuentran nuevas estrategias para seguir creciendo.

Una que ha cambiado su modelo por completo es Apotex, enfocada a los genéricos. Esta farmacéutica de origen canadiense que en México cumple su mayoría de edad este año, ha encontrado el camino en el punto de venta e hizo a un lado la promoción con el médico, antes vital para todo laboratorio.

Dirigida por Héctor Carrillo desde que llegó a México hace 18 años, Apotex inició con una línea de genéricos para Aurrera del entonces Grupo Cifra, de Jerónimo Arango, antes de que lo vendiera a Walmart.

Apotex ha acrecentado su portafolio que hoy vale unos 70 millones de dólares y desde aquí lo ha extendido hacia otros países de América Latina. Carrillo aspira a llegar a los 100 millones de dólares en ventas creciendo 35% este 2011, incluyendo 12 millones de dólares por ventas a países como Nicaragua, Haití, Panamá, Perú e incluso Singapur.

Los pasos de Apotex en genéricos han sido firmes. Hoy cubre 8% de este segmento en México. Si incluimos toda la industria farmacéutica en el país, la rebanada de Apotex apenas representa 0.4 por ciento. Pero Carrillo advierte que en esos porcentajes no se incluye lo que Apotex le produce a Genomma Lab, de Rodrigo Herrera, que las auditorías lo contabilizan por separado; y a Farmacias Similares, de Víctor González Torres, que ni se contabiliza.

Otra veta donde la empresa ha encontrado buen crecimiento es en el desarrollo de marcas propias para cadenas de farmacias. Incluso ha desplazado a QUIFA que antes era la reina de la marca propia. Actualmente, QUIFA bajó de 50 a 35% en este segmento y Apotex le produce marcas propias a Farmacias del Ahorro, Benavides, Soriana, Guadalajara, Costco, San Pablo, Unión y San Francisco de Asís, entre otras.

GE Healthcare crecerá 40%

General Electric cumple 115 años en México; su mayor crecimiento este año será con la división GE Healthcare, que hoy vende 300 millones de dólares anuales y prevé avanzar 40% en el negocio de dispositivos y tecnología médica en los próximos 3 años.

La apuesta de GE Healthcare, que dirige Francisco Chávez, obedece en parte al plan del gobierno mexicano por ampliar la oferta de servicios de salud y el acceso a los tratamientos médicos con la más avanzada tecnología.

Congela IMSS 60 fármacos soporte de vida

Nos dicen que hay más de 60 medicamentos clasificados como soporte de vida que no han sido aceptados en cuadro básico del IMSS, que dirige Daniel Karam, pero sí por el ISSSTE de Jesús Villalobos y el Seguro Popular de Salomón Chertorivski.

Si hay fármacos que llevan en espera más de 5 años para entrar al IMSS, habla de una paralización, pero también de que la quiebra técnica del IMSS ya está afectando a tal grado que los pacientes no estarían recibiendo el mejor tratamiento mínimo indispensable. Las organizaciones de pacientes se quejan por no tener el mejor medicamento, en particular los de VIH/SIDA. Aducen que Santiago Echeverría, director de Prestaciones Médicas del Instituto, se comprometió a aprobarlos cuando llegara el nuevo coordinador de las Unidades Médicas de Alta Especialidad, pero desde hace dos meses llegó al cargo José de Jesús González Izquierdo, quien dice que van a seguir con la revisión de su grupo de expertos

Toscano ante OMS

Mejor lugar no pudo haber para Miguel Ángel Toscano luego de su intenso fogueo en la titularidad de Cofepris.

Desde hoy lunes, Toscano arranca en Ginebra su papel como Ministro representante de México ante organismos internacionales relacionados con salud. De hecho, hoy participa en la sesión de la Organización Mundial de la Salud donde se tratará la producción, distribución y precio de vacunas en próximas pandemias. El tema ha generado crecientes discusiones entre países luego de que la epidemia AH1N1 evidenció un reparto irregular de vacunas antiinfluenza, donde países pobres se quedaron desprotegidos, mientras los económicamente más fuertes adquirieron demasiadas y ni las utilizaron.