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Israel en guerra, aplaude a la OIEA

Fausto Pretelin Muñoz de Cote | Globali… ¿qué?
La guerra entre Israel e Irán ha dejado la retórica a un lado para dar paso a los misiles.
El primer ministro de Israel Benjamin Netanyahu recibió un incentivo clave para iniciar una serie de ataques letales el pasado viernes en contra de Irán: una resolución por parte del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA-ONU) donde revela el incumplimiento de Teherán sobre sus compromisos para no construir la bomba nuclear.
Fue la bandera de salida para Netanyahu. De esta manera le elimina la presión asfixiante del mundo que no dejaba de mirar hacia la Franja de Gaza.
Los ataques rompen la burbuja de ficción creada por el presidente Trump sobre una supuesta negociación de un acuerdo nuclear con Teherán. Un acuerdo similar que negoció y firmó Barack Obama, la Unión Europea, Rusia y Reino Unido en 2015 con Irán, y que el propio Trump sacó a Estados Unidos durante su primer gobierno.
Nadie en el mundo ha aprovechado el regreso de Trump a la Casa Blanca como lo está haciendo Netanyahu. Obama tuvo mala relación con el premier israelí, y Biden le dejó de vender bombas pesadas, para unos se tradujo esta sanción en una especie de pellizco de monja.
El sistema político de Irán es indefendible. Simplemente por su naturaleza: una teocracia. Tampoco se puede defender el trato a las mujeres y su sistema de Justicia que incluye asesinatos en plazas públicas. Es cierto, la bomba nuclear en manos de un régimen teocrático pone la piel chinita.
La comunidad internacional tendría que pedirle a Israel que lleve las resoluciones al Consejo de Seguridad. Existen las vías diplomáticas para hacerlo. El gobierno de Netanyahu diría que uno de los cinco miembros vetaría la decisión de destruir objetivos militares. Es cierto. Sin embargo, nos hemos acostumbrado a los incumplimientos de Israel en materia de derecho internacional.
Ayer, la embajadora de Israel en México Einat Kranz Neiger comentó durante una conferencia de prensa sobre la resolución del OIEA en contra de Irán. Le pregunté si la misma habría detonado la decisión que tomó Netanyahu en atacar a Irán. Einat Kranz comentó que es importante y sumó las motivaciones históricas sobre las amenazas recurrentes de Irán en contra de Israel.
Es positivo que la embajadora use el documento del OIEA para sustentar sus críticas en contra de las amenazas de Irán, sin embargo, lo que ocurre en la Franja de Gaza y las decisiones de los colonos en Cisjordania, no las encuadra el gobierno de Netanyahu en el Derecho Internacional.
No se puede ser discrecional en materia de derechos humanos ni en el cumplimiento de las obligaciones internacionales.
No hay que olvidar que las democracias tienen compromisos con el derecho internacional.
Sin la ONU, el mundo caería en el abismo.

