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Los consumidores tienen poca fe en el rumbo de la economía mexicana

Gerardo Flores Ramírez | Ímpetu Económico
Los datos que arroja la más reciente Encuesta Nacional sobre Confianza del Consumidor (ENCO), en este caso la correspondiente a noviembre, que el Inegi dio a conocer el viernes pasado, nos indican que entre octubre y noviembre se aprecia un deterioro en el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), pero es más acentuado el deterioro cuando se compara con lo reportado en noviembre de 2024. De hecho, para un mes de noviembre, 2025 representa el cuarto peor dato de deterioro anual en los últimos 20 años.
Solo lo superan en magnitud de la caída en el ICC los datos de noviembre de 2008, 2020 y 2022. Los primeros dos corresponden a años de marcados choques económicos globales, como fueron la crisis de las hipotecas desatada en 2008 en los EUA que contagió al sistema financiero mundial y el choque producido por la pandemia del Covid en 2020. El dato de 2022 podría estar asociado al desencanto de los consumidores en cuanto a que la economía estaba tomando más tiempo del prometido por el gobierno para salir del bache en el que caímos en 2020.
Ahora, el ICC es estimado por el Inegi a partir de diversos componentes que se reflejan en las preguntas que se incluyen en la encuesta realizada a los consumidores. De esos, me llamaron la atención dos en particular: A) ¿cómo considera usted la situación económica del país hoy en día comparada con la de hace 12 meses?, y B) ¿cómo considera usted que será la condición económica del país dentro de 12 meses respecto a la actual situación?
De lo que han respondido los encuestados a lo largo del tiempo sobre esas dos preguntas, resulta evidente que el caso de noviembre de 2025, se observa un fuerte deterioro en la percepción de los consumidores sobre el rumbo de la economía en los 12 meses previos, de 6.5 puntos, que equivale a una caída del 15 por ciento frente al dato de noviembre observado en 2024. De hecho, el dato de este año, comparado con el de hace doce meses, refleja la tercera peor caída en la percepción de los consumidores, para un mes de noviembre, entre 2005 y 2025. En el caso de esta variable, se puede decir que solo hubo una peor caída, para un mes de noviembre, en 2008 y 2020, que son los años de choques económicos que afectaron gravemente a la economía.
Por lo que hace a la segunda pregunta, que refleja las expectativas de los consumidores sobre el rumbo que tomará la economía en los siguientes 12 meses, es decir, comparando con observaciones anteriores, se puede inferir si las expectativas de la gente han mejorado o si han empeorado. El dato correspondiente a noviembre este año nos indica que ese componente sufrió una caída de 8.20 puntos con relación al valor publicado hace un año, una caída de 15.8 por ciento.
El deterioro en las expectativas de los consumidores representa la peor caída observada para un mes de noviembre en los últimos 20 años. Ni siquiera en los dos años afectados por los marcados choques económicos se observó una caída tan fuerte en las expectativas de los consumidores respecto al rumbo de la economía en los siguientes 12 meses.
El gobierno de la presidenta Sheinbaum debería empezar a tomar con seriedad estos dos comportamientos, porque indican con claridad un desencanto de la gente con respecto al rumbo de la economía. En el caso de la percepción sobre el rumbo que ha tomado la economía, el dato de noviembre es consistente con la estimaciones de los analistas, en el sentido de que tendrá un crecimiento que se ubicará en una tasa entre cero por ciento y 0.4 por ciento, o sea, prácticamente nada.
En el caso de las expectativas, o lo que se espera ocurra en los siguientes doce meses, los consumidores nos están avisando que esperan que la economía empeore en el siguiente año, algo que aún no se refleja en la mayoría de las estimaciones de los analistas.
La cuestión es que el gobierno está fracasando con la población para transmitirle que el panorama mejorará. Hoy la gente lo ve peor.
*El autor es economista.

