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Londres gastará más ?de 1,300 mdd
Londres ha aprendido a convertirse en una fortaleza durante los eventos deportivos. Esta ocasión no será la excepción, pues este domingo se celebrará el maratón en la ciudad.

Londres ha aprendido a convertirse en una fortaleza durante los eventos deportivos. Esta ocasión no será la excepción, pues este domingo se celebrará el maratón en la ciudad, después de los recientes ataques ocurridos durante el maratón de Boston, donde dos explosiones en la línea de meta dejaron tres muertos y cientos de heridos.
Por ello, será indispensable asegurar a todos y cada uno de los participantes, espectadores y organizadores del maratón; para tal efecto, podrían llegarse a gastar hasta 1,337 millones de dólares, sólo para garantizar que ningún hecho violento se registre durante el evento. Esto, si se toma en cuenta que se esperan a 650,000 espectadores, sólo 350,000 menos de los que visitaron la ciudad para los Juegos Olímpicos en el 2012, además de 37,000 corredores.
Durante la justa veraniega, los londinenses no dudaron en invertir 1,750 millones de dólares para hacer de los JO un evento tranquilo y que los visitantes se sintieran seguros de estar en las diferentes instalaciones deportivas, desplegando un total de 23,700 elementos de seguridad.
Y es que para los británicos, la seguridad nacional no ha sido fácil. La capital londinense ha vivido ataques terroristas que, aunque no han tenido relación con alguna competencia deportiva, han encendido las alertas de los británicos durante eventos masivos.
La agresión más reciente, ocurrió el 7 de julio del 2005, cuando a las 8:50 de la mañana, tres explosiones paralizaron el sistema de transporte público de Londres, mientras una cuarta detonación casi una hora después, estalló en un autobús en la Plaza Tavistock. En los ataques murieron 56 personas y 700 más resultaron heridas.
Gran Bretaña ha sido el principal aliado de Estados Unidos en las guerras de Irak y Afganistán, un hecho que hace del país europeo un claro blanco de ataque por grupos islámicos radicales, por lo cual la seguridad en cualquier evento masivo es una obligación.
Pero no sólo será la policía quien se encargue del tema. De acuerdo con el reporte del Comité Organizador del maratón, cada año los voluntarios juegan un papel fundamental al respecto. Con el entrenamiento se les provee de las herramientas necesarias para saber las reglas que deben de seguir en caso de una contingencia , consigna el manual de la organización.
Así pues, lo ocurrido en Boston parece haber cambiado algo intangible, esa parte de fiesta y expectación que se tenía en una de las pruebas más exigentes del atletismo, los 42.195 kilómetros tendrán que ser, a partir de hoy, la distancia más blindada en el mundo.