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Política contracíclica tradicional no ayudará a enfrentar crisis: SHCP
Inyectar más dinero al gasto no funciona en una economía que opera con restricciones.

Implementar una política contracíclica para enfrentar la crisis económica actual, causada por el Covid-19, no funcionaría, indicó Arturo Herrera, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Ante el Senado de la República, el titular de Hacienda explicó que existen al menos tres tipos de crisis económicas. Una es la crisis de oferta, como las que se presentaron en el país en los 80, cuando la inflación aumenta, no hay oferta y se genera un estancamiento.
Por otro lado, existe la crisis de la demanda, cuando el gasto de la sociedad no alcanza y es ahí cuando entran en acción las políticas contracíclicas, en las cuales ante la disminución de la demanda en el mercado, el gobierno impulsa un mayor gasto para estimular esa demanda.
“Y tenemos una crisis que es extraordinariamente diferente, que es ésta, una crisis generada por una pandemia. Esta es la primera vez en la historia en la que se hace una crisis. En general los gobiernos tratan de evitarlas, pero esta es la primera vez que generamos una crisis, que decidimos parar la economía para evitar un contagio. Hay un precio asociado a evitar el contagio, y la política contracíclica tradicional no funciona en esta (crisis)”, señaló durante su comparecencia en el Senado.
Por ejemplo, añadió, al implementar una política fiscal contracíclica, se inyecta más gasto a la economía para aumentar el consumo; sin embargo, ante las restricciones en algunos establecimientos, como restaurantes y cines que operan con capacidad restringida, no se genera mayor demanda.
“Lo que ahora se reconoce es que no hay disyuntiva entre economía y salud. Si la pandemia no está bajo control, la economía no puede seguir operando.
Ingreso Básico Universal
Ante los cuestionamientos de los senadores sobre si es posible la aplicación de un programa de Ingreso Básico Universal, Arturo Herrera explicó que esto tendría un costo de aproximadamente 1.9 billones de pesos al año, esto es 8% del Producto Interno Bruto (PIB).
“Esta es una cantidad que es superior al total de las participaciones federales y todos los fondos que reciben los estados. Me parece que incluso eso representaría más de 8% del PIB. Por eso ésta es una discusión que se ha venido posponiendo, incluyendo en las economías avanzadas, porque se piensa que si hubiera recursos como estos en realidad a lo que hay que llevarlos es a la inversión, a la educación, etcétera, para permitir que esos trabajadores se inserten en el mercado laboral”.
Agregó que en países como Francia y Dinamarca este tipo de medidas se llevan a cabo gracias a los altos niveles de recaudación de impuestos que tienen, que representan poco más de 40% de su PIB.
Reforma fiscal penal
A nueve meses de que entró en vigor la reforma fiscal penal para reforzar el combate contra las factureras, ésta ha dejado ingresos por 500 millones de pesos al erario público, informó Herrera.
Recordó que, previo a la entrada en vigor de estas modificaciones, algunos contribuyentes se acercaron a las autoridades para ponerse al corriente y hacer el pago de impuestos, por lo cual el año pasado se recuperaron 2,000 millones de pesos.
“Son alrededor de 2,500 millones de pesos los ingresos que se han tenido de los cuales, 2,000 millones se dieron por un acercamiento espontáneo de un conjunto de empresas a la autoridad el año pasado, mientras que en los primeros nueve meses en que esta medida ha operado se han recuperado 500 millones de pesos”, explicó.