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Diputados aprueban crear la Ley de Economía Circular para impulsar el reciclaje en todo el país
De manera exprés, y con el apoyo de todas las bancadas, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó expedir la Ley General de Economía Circular y reformas a otras normas con el fin de crear lineamientos para impulsar el reciclaje a nivel nacional.

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De manera exprés, y con el apoyo de todas las bancadas, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó expedir la Ley General de Economía Circular y reformas a otras normas con el fin de crear lineamientos para impulsar el reciclaje a nivel nacional; la reducción de desperdicios; incrementar el aprovechamiento de los productos y minimizar la generación de residuos.
Con 460 a favor, el Pleno de San Lázaro envió al Senado la reforma que expide la Ley General de Economía Circular y se reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, así como de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos.
Con dichos cambios, el Congreso busca crear criterios para “cuidar y conservar el medio ambiente a través de políticas y mecanismos en materia de economía circular para incrementar la vida útil de los productos; así como minimizar, recuperar, aprovechar y valorizar los residuos”.
Lo anterior con el fin de mitigar la generación de más de 127 mil toneladas de basura y residuos sólidos urbanos que diariamente se generan en México, de los cuales apenas una pequeña fracción logra reincorporarse a los procesos productivos.
Las modificaciones plantean que al Ejecutivo Federal le corresponderá la expedición de instrumentos económicos para fomentar la economía circular; prever que el gobierno federal, los estados y municipios deberán promover la participación y el involucramiento de los distintos sectores en la generación de materiales para una transición hacia modelos de economía circular, así como propiciar la generación de campañas de comunicación masiva, para el fortalecimiento de la conciencia ambiental y la adopción de hábitos de consumo responsable.
Mientras que los sectores productivos tendrán la obligación de generar o desarrollar productos con diseño circular, cuando ello resulte ambiental, técnica y económicamente viable, así como implementar las políticas, bases y principios de economía circular.
Se destaca que a partir de la entrada en vigor de la presente Ley y dentro del plazo de cinco años con prórroga por acuerdo, los rellenos sanitarios autorizados iniciarán un proceso progresivo de reconversión para cumplir con las metas de reducción de la disposición final para promover su integración en el Modelo de Economía Circular Nacional.
Asimismo, se destacó la inclusión en esta ley de los llamados “pepenadores”, ya que se estableció que para efecto de la Ley se entenderá por reciclaje inclusivo el reconocer y visibilizar la aportación social, económica y ambiental de la actividad de las personas recicladoras de base o pepenadoras, así como el desarrollo e implementación de modelos que incluyan a estas personas en la economía circular.
Entre los argumentos de esta iniciativa, impulsada por el PVEM y PAN, se habla de que esta nueva legislación tiene por objeto cuidar y conservar al medio ambiente a través de políticas y mecanismos en materia de economía circular para incrementar la vida útil de los productos, minimizar, recuperar, aprovechar y valorizar los residuos, así como establecer la concurrencia de atribuciones entre la Federación, entidades federativas, municipios y demarcaciones territoriales de la Ciudad de México.
Establece e impulsa los mecanismos directos e indirectos de circularidad que sean ambiental, técnica y económicamente viables que deben aplicarse a los materiales, residuos y categorías de productos.
Según datos presentados para este dictamen, en México existen más de 2,250 sitios de disposición final y 90% de ellos son tiraderos a cielo abierto y se recicla sólo el 25%de lo que consumimos, por lo que se pierden 1,300 millones de toneladas en comida producida al año para el consumo humano.
La reforma también prevé incentivos fiscales para los procesos productivos basados en el modelo de economía circular y para la recolección de plásticos en zonas costeras y espacios públicos.
