Las petroleras estatales más importantes de América Latina, Pemex y PDVSA, cuyos recursos de hidrocarburos son de los más prolíficos de la región, tienen una gran carga impositiva para solventar las necesidades fiscales y planes sociales de sus gobiernos, de acuerdo con un reporte de Moodys.
La calificadora advierte que en ambas compañías existe un riesgo clave que son los precios del crudo, debido a que si la cotización del petróleo cae en rangos inferiores a lo esperado, ambas compañías enfrentarían crecientes requerimientos de capital.
Así como un mayor apalancamiento en tiempos de menores flujos de efectivo interno y potencialmente de acceso restringido a capital externo.
En contraste, Thomas Coleman, senior vicepresident de Moodys, añade que Petrobras y Ecopetrol son las mejor posicionadas para seguir adelante con sus programas de capital y planes de crecimiento.
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