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Marruecos le da vida al mundo árabe
España se retira herida del Mundial de Qatar, pues fallaron en la tanda de penaltis tres oportunidades que provocaron el triunfo de los marroquíes, la mayor sorpresa africana en esta instancia.
Foto: AFP
El español Achraf Hakimi tuvo el gol decisivo. En la tanda de penaltis, sus piernas perfilaron el disparo que congeló las miradas de Marruecos y de la identidad africana.
La primera Copa del Mundo celebrada en una nación árabe tiene al primer cuartofinalista del mundo árabe. Marruecos se convirtió en el cuarto país africano en llegar a los cuartos de final en el torneo de futbol más grande del mundo al vencer a España 3-0 en la tanda de penales, después de un empate 0-0 en la prórroga.
El portero marroquí Yassine Bounou, que milita en el Sevilla, salvó dos de los tres penales que enfrentó de Carlos Soler y Sergio Busquets. El disparo de Pablo Sarabia pegó en el poste.
Las selecciones africanas que han superaron una eliminatoria de octavos de final han sido Camerún en 1990, Senegal en 2002, Ghana en 2010. Ninguno de los tres avanzó a semifinales. Marruecos, que también llegó a los octavos de final en el Mundial 1986 en México, es también el único equipo de fuera de Europa o Sudamérica que alcanzó los cuartos de final en Qatar.
“Este es un momento especial para toda África, para todos los países árabes, para todos los musulmanes de este mundo. Tratas de hacerlos felices. Y creo que va bastante bien”, dijo el mediocampista marroquí Azzedine Ounahi.
El mundo árabe se estremeció primero al inicio del torneo cuando Arabia Saudita derrotó a Argentina en la fase de grupos. Los saudíes fueron eliminados, al igual que el anfitrión Qatar y Túnez, eso dejó a Marruecos como el abanderado del mundo árabe.
“Estoy muy orgulloso de mi afición, de mi gente y del pueblo árabe. También porque creo que aquí hay gente qatarí, tal vez gente argelina, gente tunecina, gente árabe y gente africana”, dijo el seleccionador de Marruecos, Walid Regragui, quien es el primer africano en llevar a un equipo africano a los cuartos de final.
Achraf Hakimi, que nació en Madrid y anteriormente jugó en el Real Madrid, convirtió el penalti decisivo. También marcaron Abdelhamid Sabiri y Hakim Ziyech, que regresaba a la selección tras una disputa con el anterior técnico.
Marruecos avanzó de un grupo difícil que incluía a Canadá, Bélgica, semifinalista de 2018, y Croacia, subcampeona de 2018. El equipo llegó al torneo con más de la mitad de su plantilla formada por jugadores que no habían nacido en Marruecos, la mayoría de cualquiera de los 32 países participantes.
“Creo que hoy le mostró al mundo que cada marroquí es marroquí con su pasaporte. Cuando llega a la selección, quieres morir, quieres pelear. Y eso es lo que quiero mostrar. Y ahora, tenemos un ejemplo. El entrenador nació en Francia pero nadie puede tener mi corazón sino mi país”, dijo Regragui.
España fue eliminada por la anfitriona Rusia en una tanda de penaltis en la Copa del Mundo de 2018, y por Italia en las semifinales de la Eurocopa del año pasado. El equipo no ha pasado de los octavos en la Copa del Mundo desde que ganó el torneo en 2010 en Sudáfrica.
“Es mi responsabilidad. Elegí a los tres primeros lanzadores de penaltis y luego ellos mismos podían decidir. Pero los primeros tres fueron mi decisión, y hubiera hecho lo mismo otra vez. Lo único que deseaba poder hacer era sacar a Bounou y poner otro portero allí”, dijo el seleccionador de España, Luis Enrique, quien antes del partido dijo que había pedido a sus jugadores que practicaran 1,000 tiros penales con sus clubes.
España jamás había perdido ante Marruecos, y en pleno Mundial, la historia cambió.
