Cruz Azul: la liguilla postítulo se vive con más exigencia

Cruz Azul empieza su camino en la postemporada de la Liga MX con solo dos caminos: el bicampeonato o nada. Su andar comenzará y podría acabar este mismo fin de semana, cuando enfrente a Monterrey dentro del repechaje, en partido único a celebrarse en el estadio Azteca y sin público, debido al castigo que recibió el club por los gritos discriminatorios de sus aficionados en la penúltima jornada.

Dentro de la Noria la vista está enfocada en repetir el título del Guardianes 2021. Aunque pudiera pensarse que La Máquina ya saldó su deuda de 23 años con los aficionados luego del campeonato, los jugadores y cuerpo técnico no lo ven así. No hay relajación ni excusas, la mira sigue sobre el seguir haciendo historia.

—¿Cómo se vive la primera liguilla poscampeonato dentro del club, hay más relajación o presión?

—“Se vive con mucha exigencia, porque en primer lugar tenemos el plantel para defenderlo y para poder repetir el título. Estamos en una situación donde nos queda la última bala para seguir con ese sueño, pero la exigencia es muy alta por lo que se logró el torneo pasado y también en los antepasados, donde se venían haciendo las cosas muy bien a pesar de no ganar. Estamos conscientes de lo que nos jugamos este fin de semana y vamos a salir a proponer, a ganar y saber que tenemos el equipo y talento suficiente para repetir el campeonato”, respondió el mediocampista, Rafael Baca, a El Economista.

Baca Miranda está jugando su torneo número 15 con la playera de Cruz Azul, desde que llegó en el Clausura 2014, siendo el tercero más longevo del plantel actual detrás de los "eternos" José de Jesús Corona y Julio César Domínguez. Conoció la presión tras la sequía de títulos desde el primer momento, la cual sigue siendo la misma a pesar de ya haberlo logrado.

“La deuda es más de nosotros mismos, porque hemos dejado de hacer muchas cosas. Podría poner 1,000 pretextos, pero no soy así, al final tienes que afrontar las cosas tal como se presentan”, señaló en conferencia de prensa previo al repechaje contra Monterrey.

Este será el tercer torneo desde que regresó el repechaje al futbol mexicano y es la primera vez que Cruz Azul no clasifica directo a cuartos de final; en los anteriores (Guardianes 2020 y 2021) su balance fue tanto alto que finalizó como semifinalista y campeón, respectivamente.

La confianza de Baca y el resto del equipo reposa en el hecho de tener al mismo plantel que hace seis meses, aunque con inconsistencias que les costaron terminar en octavo lugar: “Ha sido un torneo muy irregular, que no se lo merece este grupo por la calidad que tiene, además porque en Cruz Azul se mide con una vara muy alta, o eres campeón o es un fracaso, las cosas están claras para los que estamos aquí”.

A diferencia del torneo del campeonato, donde La Máquina finalizó la fase regular como líder con 41 puntos y 13 victorias, ahora solo alcanzó a tener 23 puntos y cinco triunfos, por lo que en la tabla general fue rebasado incluso por clubes de mucho menor nómina como Atlas, Toluca y Puebla. Por ello, la batalla contra Monterrey en el repechaje es vista como el trampolín para limar asperezas con su público y no recaer en los fantasmas de antaño.

La afición tiene que estar tranquila y saber que somos capaces de avanzar, depende mucho más de los que estamos sobre la cancha, recae la responsabilidad en nosotros en saber qué queremos lograr: seguir trascendiendo o si nos vamos a relajar y dejar que pasen cosas como en el partido contra Pumas (en la última jornada, donde les remontaron un 3-1). El futbol nos está dando otra oportunidad y ya estamos enfocados, sabiendo que es la última bala que tenemos”.

Cruz Azul jugará este partido definitivo sin el calor de su gente, ya que la Federación Mexicana de Futbol (FMF) vetó a su público por los gritos discriminatorios mostrados en su penúltimo juego del torneo, el 3 de noviembre en la derrota 0-1 ante León. En dicho cotejo, los aficionados celestes incurrieron en al menos cuatro gritos y el árbitro tuvo que activar el paso 1 del protocolo contra esta actitud. La consecuencia es que el repechaje contra Monterrey será a puerta cerrada.

“La afición es de mucha importancia, ellos son el empuje cuando el equipo ocupa esa ayuda externa de alentarnos y seguir motivándonos. Sí se va a extrañar a la afición pero tenemos que enfocarnos en el partido y saber que lo tenemos que hacer por ellos, sería muy lamentable quedar fuera y saber que nuestra afición no tuvo oportunidad de estar ahí, mientras que sería bonito avanzar y tener de nuevo a nuestra afición en cuartos de final”, concluyó Rafael Baca.