Lectura 3:00 min
Gastronomía escénica: Un viaje sensorial al mundo mexica
¿A qué sabe una deidad mexica?, ¿Puede un platillo contar una historia ancestral?,
¿Y si al primer bocado se abriera también un portal al pasado?
Por primera vez en México, el arte, la gastronomía y el performance se funden en una experiencia sin precedentes: Gastronomía Escénica, una cena ritual y multisensorial que invita a recorrer los misterios del universo mexica a través del cuerpo, los sentidos y el alma en Juncal Tablao Flamenco, Álvaro Obregón 293, Roma, CDMX.
Presentada por Juncal Centro de Espectáculos y la artista escénica Chiquinquirá Borbón, esta propuesta convierte una cena en ceremonia, una mesa en escenario, y al espectador en testigo de un rito sagrado.
Cena Mexica.
La experiencia, que se vivirá los miércoles 9 y 30 de abril en el Juncal Tablao Flamenco, es un viaje sensorial guiado por Xólotl, deidad mexica del movimiento y la transformación.
Desde el inicio, el público será envuelto en una atmósfera ceremonial donde cada elemento –la luz, los aromas, los sonidos, el tacto, el sabor– está diseñado para despertar memorias profundas.
La idea original nace del imaginario de Chiquinquirá Borbón, quien desde niña imaginaba los sabores que no podía probar.
“La imaginación me permitía saborear cada ingrediente, volvía ese acto algo muy teatral. Cocinar para otros es un acto sublime, tan performático como abrir el telón”, comenta.
Gastronomía Escénica es, para ella, una plataforma que une artistas y chefs, en una comunión que alimenta cuerpo y espíritu.
En esta edición, el homenaje es para la cosmovisión mexica a través de las obras vivas del artista Javier Reivaj.
Cuatro esculturas escénicas inspiradas en Quetzalcóatl, Mictecacíhuatl, Huitzilopochtli y Xólotl cobran vida a través del cuerpo de performers que encarnan sus símbolos.
“Mi trabajo plástico se vuelve humano. Estas piezas dialogan con la comida, porque la comida también era sagrada. Por ejemplo, el guajolote se ofrendaba a Mictecacíhuatl como símbolo de tránsito al inframundo”, explica Reivaj.
Gastronomía escénica.
Cada platillo es también una narrativa. El menú, a cargo del chef internacional Gustavo Bauer M., fusiona técnicas contemporáneas con ingredientes ancestrales. El guajolote cocido a baja temperatura en mole de fruta, el amaranto como ofrenda a Huitzilopochtli, el maíz legado de Quetzalcóatl... todo en esta cena tiene un porqué, una raíz, un relato que se activa en cada bocado.
Y si el arte plástico suele buscar la permanencia, esta experiencia abraza lo efímero. “
La belleza de este proyecto está en su temporalidad. El arte aquí es movimiento, es fugacidad. Es presente puro”, dice Reivaj.
Más que una cena, Gastronomía escénica es un acto espiritual. Para Chiquinquirá Borbón, el arte es conexión con la divinidad:
“Al ingerir cualquier alimento a mi templo, mi cuerpo, alimento también mi alma. Esta experiencia me conecta con lo ancestral, con mi raíz mexicana. Por eso, esta primera edición es para honrar a los mexicas y sus deidades”.
Una noche donde todo se vuelve ceremonia: el fuego, la palabra, el sabor, la danza, el cuerpo. Una noche para quienes buscan mucho más que cenar: una experiencia que deja huella.
Para más informes en su página de FB: Juncal Tablao Flamenco