Buscar
Opinión

Lectura 4:00 min

Adiós a la prórroga arancelaria

Jorge A. Castañeda | Columna invitada

Mañana, viernes, comienza agosto y vence el temido plazo de los aranceles. Los países que no hayan llegado a un acuerdo bilateral con la administración Trump enfrentarán aranceles diferenciados de entre 15 y 50%, según el país y el sector. Ya no habrá, según el representante de comercio de Estados Unidos, más prórrogas ni periodos de gracia. Al momento de escribir esto, México y EU no han anunciado ningún acuerdo, y a menos que suceda algo inesperado en las próximas horas, no vamos a ser uno de los países con acuerdo bilateral con EU, o eso parece.

En la última semana, el gobierno de Trump ha anunciado acuerdos bilaterales con Japón y la Unión Europea que, pese a las críticas, parecen haber sido beneficiosos para EU desde la perspectiva mercantilista de Trump.

En el caso de Japón, firmaron un acuerdo que establece un arancel uniforme del 15% para casi todas sus exportaciones hacia EU, incluyendo automóviles, camiones, arroz y productos agrícolas. Anteriormente, Estados Unidos había amenazado con aplicar 25% de arancel. A cambio, Japón accedió a abrir aún más su mercado a productos estadounidenses y anunció inversiones equivalentes a 550,000 millones de dólares en EU. En reciprocidad, Japón aplicará aranceles del 15% a importaciones estadounidenses.

El caso de la UE fue más controversial. El acuerdo fue muy criticado en Europa por las concesiones que Ursula von der Leyen ofreció a Trump. Estados Unidos y la UE fijaron un arancel del 15% para la mayoría de los productos europeos exportados a EU, evitando así amenazas de aranceles del 30% y una guerra comercial. A cambio, la Unión Europea se comprometió a comprar 750,000 millones de dólares en energía estadounidense, invertir 600,000 millones en EU, además de grandes compras de equipamiento militar. Sin embargo, no todos los productos están cubiertos: el acero y el aluminio europeos enfrentan un arancel especial del 50%, mientras que ciertos bienes, como piezas aeronáuticas y aeronaves, tendrán tarifa cero. La mayoría de los productos estadounidenses siguen entrando a Europa con aranceles bajos o nulos, ya que no hubo reciprocidad equivalente por parte de la UE.

Mientras tanto, las negociaciones comerciales entre China y EU siguen sin un acuerdo definitivo, pero ambas partes han optado por extender la tregua arancelaria vigente y mantener el diálogo. Actualmente, Estados Unidos aplica un arancel de 30% a productos chinos (tras haber llegado a 145%), y China mantiene uno de 10% a bienes estadounidenses (bajando desde 125%). Persisten diferencias estructurales importantes y se espera la ratificación política de una nueva prórroga por parte de Trump.

Para México no parece haber un arreglo en el corto plazo. El mismo secretario de Economía afirmó que, en términos comerciales, México ya hizo todo lo que tenía que hacer. El problema es que nuestra negociación no es solo comercial. A la par de una relación comercial de más de 800,000 millones de dólares al año, están los temas de migración, narcotráfico y seguridad, claves en la narrativa política de este gobierno estadounidense. Sin acuerdos reales sobre estos temas, la amenaza seguirá ahí.

Aun así, hay un consuelo: todo indica que las exportaciones bajo el paraguas del T-MEC seguirán exentas. Los aranceles generales aplicarán a lo que esté fuera, y habrá casos especiales como el tomate o el acero, en los que urge un acuerdo. Nunca dejará de ser paradójico que a los gobiernos de izquierda los salve el tratado de libre comercio contra el que lucharon tantos años.

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros Newslettersregístrate aquí

Últimas noticias

Noticias Recomendadas