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Colaboradores, primer indicador de responsabilidad social en las empresas
Normalmente la responsabilidad social de la empresa se mide con los programas o apoyos que tiene al exterior de ésta, sin embargo, poco se habla de lo que las empresas hacen al interior de las mismas. La responsabilidad social de cualquier empresa debe iniciar desde el cuidado de su recurso más importante que es su gente y su entorno. Creo que de la forma en que la empresa se comporta en el interior se encuentra el verdadero compromiso que tiene al exterior, con la sociedad.
La mejor forma de ser una empresa socialmente responsable inicia desde la parte de la contratación de personal. Las oportunidades laborales que se abren en la organización deben de ser cubiertas, en un inicio, dando oportunidad al talento interno para que se desarrolle, así las vacantes deberían ser posteadas y dejar que el personal decida si le interesa y tiene capacidad de cubrirlas.
Este simple ejercicio fomenta el desarrollo laboral de los individuos y la sana competencia. La selección final no solo reside en el talento interno, pero se permite que el talento interno compita por una posición con candidatos externos, así la organización termina con los mejores elementos posibles.
Un segundo elemento es la parte de compensación. La compensación es la retribución económica que tiene una persona por los resultados que aporta a la organización. Es importante notar que dije resultados. Esta medida es muy diferente al tiempo o al trabajo. La experiencia del home office o trabajo remoto, nos ha enseñado que lo más importante de los colaboradores es que entreguen resultados.
En esta modalidad a distancia, resulta altamente difícil para la gerencia ver que es lo que hace el empleado, pero el resultado siempre se puede medir y notar. Lo mejor de premiar el resultado como medida base para cuánto gana una persona, es que elimina los factores de género, nivel educativo, edad o cualquier otra variable que no sea relevante para obtener resultados positivos.
Una tercera señal es la capacitación constante. No podemos tener un adecuado desarrollo de nuestro personal, si no le brindamos las posibilidades de conocer y desarrollar nuevas actividades y/o áreas. La capacitación es el principal elemento que iguala las oportunidades dentro de la empresa para las personas.
Es posible que el talento interno no tenga la experiencia o el conocimiento, sin embargo, sí puede tener la actitud y el potencial para llegar a niveles superiores. El facilitar la transición mediante el apoyo con una capacitación que les permita seguir proyectándose al interior es fundamental y esto, nos asegura menor rotación de personal y un mayor compromiso de parte del empleado a la organización que le permite crecer.
En un cuarto punto me permitiré resaltar la importancia de una adecuada descripción de puestos, una evaluación de desempeño, y planes de carrera adecuados. Una empresa responsable reconoce que no todos sus empleados tienen las características necesarias para llegar a ser directores. Sin embargo, debe crear las posibilidades y que sea el talento y los resultados de los empleados los que determinen quienes son los que pueden ascender, quienes tendrán un desarrollo más lento y cuáles son los que tendrán que dejar la organización.
En mi opinión, el dejar salir a un empleado es también un acto responsable ya que es posible que el tipo de cultura organizacional, la actividad de la empresa o las actividades que desempeña no sean del agrado del colaborador. El que pueda explotar su potencial en otra organización es un acto responsable y es mejor que condenarlo a años de olvido en una posición en la que sólo está por la seguridad de un sueldo, pero que no le motiva a seguir creciendo.
Sé que muchos lectores discreparán conmigo y dirán que son actividades de Recursos Humanos, sin embargo, yo dejo la siguiente reflexión ¿no es el crear y desarrollar al mejor ser humano posible para la empresa, el país y su familia, el primer paso para ser socialmente responsable?
*El autor es director General de Creditaria México.