Remesas a países de origen pueden ser superiores a las registradas oficialmente

Las remesas que reciben los hogares de origen de los emigrantes pueden ser mayores a los flujos registrados por canales oficiales de envío, reconocieron investigadores de la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco Mundial.

“Si bien las remesas suelen registrarse en la balanza de pagos de un país, muchas transferencias ocurren a través de canales informales, lo que dificulta medir con precisión el volumen total de remesas que fluyen hacia los países en desarrollo”, explicaron expertos de la Reserva Federal.

Al interior de un documento de investigación titulado Global remmitances cycle, divulgado en febrero de este año, refirieron al Banco Mundial para precisar que en el 2023 las remesas globales alcanzaron un récord de 818,000 millones de dólares.

Esta cifra es cuatro veces el monto total de la asistencia oficial para el desarrollo proporcionada por los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Los expertos de la Reserva resaltaron que la adopción de tecnologías digitales ha facilitado los flujos de remesas y las restricciones de la movilidad que obstaculizaron la migración han desempeñado un papel fundamental.

El Banco Mundial ya había explicado que “algunos trabajadores desplazados en otros países no pueden hacer uso de los canales formales para enviar dinero a sus hogares de origen por las barreras regulatorias”.

Es decir, si no cuentan con la documentación necesaria para realizar los envíos, si no hablan el idioma del país donde trabajan o si el servicio de envío genera un costo adicional que implique reducir los envíos o encarecer la transferencia.

“Los costos de cumplimiento de la normativa contra el blanqueo de dinero también disuadieron a los inmigrantes de utilizar los sistemas digitales de transferencia de dinero”, resaltaron y es cuando recurren a vías informales para transferir fondos a sus familias en el país de origen, lo que dificulta la transparencia de esta las operaciones de envío y entorpece la lucha contra los delitos financieros, acotaron.

Canales no oficiales de envío

En un análisis aparte, desarrollado en el 2023, explicaron que los canales informales a veces se liquidan mediante el comercio de bienes, con lo que se eliminan los costos de transacciones por medios formales, como las comisiones que cobra una remesadora, o una institución financiera.

Los canales informales de envíos de remesas son métodos no regulados ni autorizados para transferir dinero y suelen ser utilizados para evadir normas o restricciones.

En aquel análisis explicaron que “de vez en cuando los gobiernos intentan someter a las remesas a tributación argumentando que los ingresos podrían utilizarse para fines productivos”.

Enfatizaron que “un impuesto de este tipo suele ser difícil de aplicar, por lo que es altamente posible que las personas opten por eludir los canales formales de envíos de remesas”.

Pueden incluir envío de dinero a través de viajeros, que coloquialmente se conocen como “mulas”; el uso de redes familiares o sociales o el manejo de sistemas de pago no oficiales como plataformas o servicios que no están regulados para el remitente ni el destinatario, como los criptoactivos.

Refirieron que “en los países donde la normativa ha permitido a las fintech aprovechar las ventajas de la tecnología moderna, el costo del envío de remesas se ha reducido drásticamente”.

“Con una mejor normativa y menores costos, las remesas pueden aumentar la inclusión financiera. También se pueden aprovechar las remesas para ampliar el acceso de las personas a las cuentas bancarias así como a productos de ahorro, préstamo y seguros”, señalaron.

Gravar remesas, la idea recurrente que no es referencia

Al interior del análisis titulado “La resiliencia de las remesas”, explicaron que “de vez en cuando los gobiernos intentan someter a las remesas a tributación argumentando que los ingresos podrían utilizarse para fines productivos”.

Enfatizaron que un impuesto de este tipo suele ser difícil de aplicar, por lo que es altamente posible que las personas opten por eludir los canales formales envíos de remesas”.

Asimismo, explicaron que “un enfoque basado en el riesgo que reduzca los requisitos reglamentarios para las sumas pequeñas, por ejemplo, inferiores a 200 dólares, podría servir para explotar el potencial de las remesas transfronterizas digitales”.

Según el Banco Mundial, las remesas a los países de ingresos bajos y medios crecieron 0.7 % en el 2023, alcanzando la cifra récord de 656, 000 millones de dólares.

Las remesas siguen siendo una fuente clave de financiamiento externa para los países de ingresos bajos y medios, superando a la inversión extranjera directa (IED) y la asistencia oficial para el desarrollo.

A diferencia de los flujos de capital, como la IED, que suelen concentrarse en unas pocas grandes economías emergentes, las remesas se distribuyen de forma más equitativa entre los países en desarrollo.