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En el sexenio, subsidio millonario a las gasolinas
Este año, el costo fiscal sería de 207,000 millones de pesos, equivale al ingreso propio del IMSS.

Durante el sexenio de Felipe Calderón, los subsidios destinados a diésel y gasolinas podrían superar los 800,000 millones de pesos, pues tan sólo en este año esta subvención podría llegar a 207,000 millones de pesos.
Según un análisis del Centro de Estudios de la Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados sobre el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), el subsidio estimado para este año equivale a los ingresos propios estimados para el IMSS en el 2012 y 81.6% del presupuesto asignado a la Comisión Federal de Electricidad.
Se explica que de observarse para los siguientes meses un precio similar al de referencia para la gasolina y diésel reportado en el New York Mercantile Exchange, se estima que tendría un costo elevado que se sumaría al que se tuvo entre el 2006 y el 2011 por un monto acumulado de 654,049 millones de pesos, es decir, un gasto fiscal importante para las finanzas públicas del país.
Para dimensionar el tamaño de la subvención a los combustibles, el CEFP establece que de continuar con los niveles actuales de precios, el subsidio eliminará considerablemente la posibilidad de contar con ingresos excedentes y disminuiría de manera importante las participaciones a estados y municipios.
El CEFP estimó el impacto que se tendrá al cierre del 2012, tomando datos del mercado de futuros de Nueva York que incorporó al precio de referencia el ajuste por calidad y los costos de transporte y de manejo promedio, además del margen comercial a los distribuidores, comparándolo con el precio al público promedio.
TRANSPORTE PÚBLICO
Para los especialistas, en un escenario actual de precios de energéticos elevados y altos subsidios a las gasolinas y el diésel, sería importante analizar la conveniencia de otorgar beneficios dirigidos a la población de menores ingresos.
Sugieren que podrían destinarse subsidios al transporte público en lugar de seguir con una subvención que beneficia, en mayor medida, a los hogares con mayor ingreso per cápita.
Se hace referencia que entre enero y julio del 2012, el precio promedio de la mezcla mexicana de petróleo se situó por encima de los 103.9 dólares por barril, es decir, 19 dólares por encima del precio utilizado para la estimación de los ingresos contenidos en la Ley de Ingresos de la Federación 2012 (84.9 dólares).
Explica que dicho comportamiento propició aumentos considerables en los precios de los combustibles automotrices a nivel internacional.
leonor.flores@eleconomista.mx