No basta un acuerdo cupular

Es muy positivo el acuerdo logrado entre las dirigencias del PAN y PRI para ir juntos en las elecciones del Estado de México y Coahuila este año y en las elecciones presidenciales y del gobierno de la Ciudad de México en 2024. No incluyó al PRD ya que, aunque estaba presente su dirigente, es claro que no fue tomado en cuenta en el acuerdo sobre las candidaturas.

Si bien en el caso de las elecciones de este año tiene lógica el acuerdo para que sea el PRI quien encabece las candidaturas en las elecciones a las dos gubernaturas, ya que según las encuestas sus candidatos llevan la delantera, en el caso de la elección presidencial y del gobierno de la Ciudad de México es totalmente ilógico que desde ahora se dé prioridad al PAN para decidir en ambas elecciones. Estamos todavía muy lejos en tiempo para ver quien es el candidato o candidata que tiene más posibilidades de vencer a Morena en la Presidencia y en la jefatura de gobierno.

Dejar sólo en manos de los partidos la decisión de las candidaturas es otra vez apostarle a un acuerdo cupular dejando de lado la opinión de la ciudadanía. Si no se lleva a cabo una consulta directa a la gente esta no sentirá ninguna obligación y compromiso de apoyar a los candidatos de oposición. El proceso de selección de el o la candidata a la Presidencia de la República o a los demás puestos de elección deben dirigirlo los partidos, pero debe abrirse a la participación de toda la ciudadanía a través de una consulta directa a la gente. La única forma de ganarle a Morena es con una gran participación ciudadana en las urnas y esto sólo se logrará si la elección de los candidatos se abre a la ciudadanía.

Algo muy positivo del acuerdo es que las candidaturas a cualquier puesto de elección (presidente, gobernadores, senadores, diputados o alcaldes) no están atadas a que se sea militante de un partido, por lo que cualquier persona que quiera ser candidato tendrá que ser tomada en cuenta a la hora de decidir.

En mi caso, este acuerdo me abre la posibilidad real de competir con otros candidatos o candidatas para buscar la candidatura de la oposición a la Presidencia de la República. Pienso que cada partido de la coalición debe seleccionar a su candidato o candidata de acuerdo a sus estatutos internos y debe abrirse la posibilidad de que existan uno o dos candidatos ciudadanos que participen en la consulta ciudadana.

Para que el acuerdo sea realmente un acuerdo que incluya a la sociedad civil, abría que promover el registro de candidatos de la ciudadanía a todos los niveles y establecer un mecanismo para depurar las listas y para seleccionar a los mejores candidatos o candidatas.

En el caso de las candidaturas de la posición a la presidencia es necesario empezar desde ahora a hacer debates en todo el territorio nacional. Los candidatos de Morena van a seguir haciendo campaña y más allá de denunciarlos, deberíamos los candidatos y candidatas de la oposición empezar a recorrer el país para tener más presencia y que se conozcan las diferentes propuestas.

Bienvenido el acuerdo de los partidos de oposición, pero si queremos ganar en 2024, debemos ir más allá de las cúpulas partidistas y abrir las campañas a las candidaturas ciudadanas, estableciendo un registro nacional abierto de todo aquel que tenga intención de ser candidato o candidata ciudadana.