Lectura 3:00 min
Euroesclerosis
El potencial de la economía europea está bloqueado.?En 1980-2011, el PIB de la Unión Europea aumentó?más de 3% únicamente en cinco años.
A Herbert Giersch (1921-2010), economista alemán, se atribuye el término euroesclerosis, inventado hace más de 30 años.
La economía europea no ha sido, en mucho tiempo, muy dinámica. Algo ha bloqueado su potencial.
Por ejemplo, entre 1980 y el año pasado, el PIB de la Unión Europea aumentó más de 3%, únicamente en 1988, 1989, el 2000, el 2006 y el 2007, y disminuyó en 1981, 1993 y el 2009. Según los pronósticos más recientes del Fondo Monetario Internacional (FMI), no crecerá más de 2.1% anual entre este año y el 2017.
En contraste, el incremento anual del PIB de un subconjunto de la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia (Filipinas, Indonesia, Malasia, Tailandia y Vietnam) ha sido menor que 3% en tres ocasiones: en 1985, 1998 y el 2009. Y el PIB de América Latina y el Caribe, con altibajos, subió más que 3% en 17 años y se redujo en tres (1982, 1983 y el 2009).
En 1980-2011, el PIB mundial descendió exclusivamente en el 2009 (0.6 por ciento). En este año hubo recesión en 89 de los 184 países considerados por el FMI. El decremento fue mayor en las economías avanzadas: 3.6% en todo el conjunto y 4% en el Grupo de los Siete. En la Unión Europea, la baja fue de 4.2% y en el área del euro, 4.3 por ciento. Y en la Comunidad de Estados Independientes (CEI), el ajuste fue de -6.4 por ciento.
Las adversidades no se enfrentan de la misma manera en todos los países y su fuerza económica no es similar. Por eso las previsiones para el 2012 difieren: 5.4% (ASEAN-5), 4.1% (CEI), 3.4% (América Latina y el Caribe), 0% (Unión Europea) y -0.3% (área del euro).
La resolución de problemas siempre enfrenta barreras políticas. Tres párrafos de un artículo publicado en The Economist (en el 2010) ilustran lo anterior:
Cuando los europeos temen por sus empleos y sus ahorros, cuando sus gobiernos y las empresas no pueden endeudarse fácilmente, cuando los bancos quiebran y la moneda única tiembla, entonces la Unión Europea no tiene solamente una crisis económica, sino también una crisis política. Y, hasta ahora, los líderes europeos no han estado a la altura de la amenaza. Durante los últimos 18 meses, en su mayoría se han refugiado en la negación y la bravata, interrumpidas por discusiones y echando la culpa a los mercados financieros.
Jean-Claude Juncker, primer ministro de Luxemburgo, lo dijo mejor en el 2007: Todos sabemos qué hacer, pero no sabemos cómo ser reelegidos una vez que lo hayamos hecho [ ] La crisis ha cambiado el panorama político en Europa. Se suponía que el euro debía estimular la reforma evitando que los gobiernos restauraran la competitividad mediante la devaluación de sus monedas. Y lo hizo. No al principio, cuando Grecia, España y los demás utilizaron las tasas de interés bajas en euros como excusa para la juerga.
Pero ahora han despertado con cruda, para descubrir que la reforma no puede posponerse más.
La solidaridad europea, que protege el empleo de por vida en España para los pocos afortunados, es difícil de defender cuando significa que los jóvenes, quienes sólo podían conseguir trabajo mediante contratos temporales, han sido lanzados al desempleo. En Francia, es irritante ver sus impuestos en el pago de personas sanas que se jubilan a los 60 .
pakonunez@gmail.com?
Twitter: @ITESOee