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Crece su economía y su precarización salarial
Ocho de los 10 estados que más crecieron en el 2014 registraron un aumento en la población que no pudo adquirir una canasta alimentaria con su salario.

Con excepción de Michoacán y Guerrero, en el resto de los 10 estados que más crecieron durante el 2014 se incrementó la pobreza salarial, es decir, aumentó el número de personas que no pudo adquirir una canasta alimentaria básica con la remuneración de su trabajo.
Se trata de Aguascalientes, Querétaro, Zacatecas, Guanajuato, Nayarit, Tamaulipas, Nuevo León y Quintana Roo.
En todos ellos, la precarización salarial creció igual o más que a nivel nacional (3.7%) del cuarto trimestre de 2013 a igual periodo de 2014, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Aguascalientes fue el tigre asiático mexicano en el 2014. Su economía creció, en promedio trimestral anual, 12.3%, según el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal; sin embargo, la proporción de la población ocupada que no pudo comprar una canasta alimentaria con su salario aumentó 4.5 por ciento.
En este tipo de entidades existe un común denominador: hay una reducción del empleo que paga bien y un aumento de los que remuneran poco, refiere José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic).
Efectivamente, en los ocho estados se redujo la población ocupada que gana más de cinco salarios mínimos. En conjunto, en el cuarto trimestre de 2013, 667,529 personas estaban en ese segmento. Un año después, en octubre-diciembre de 2014, sólo 619,999, es decir, una baja de 47,530.
Esa pérdida de masa salarial termina por afectar la capacidad de consumo del mercado interno, advierte el especialista, quien menciona que este fenómeno ya no es exclusivo de las zonas más marginas del país, pues ya empieza a afectar a las entidades con mayor relevancia económica a nivel nacional, lo cual permite entender que el problema se ha acentuado en las ciudades.
Malas condiciones
¿Por qué en Michoacán y Guerrero disminuyó la pobreza salarial? De acuerdo con José Luis de la Cruz, en ambas entidades las condiciones de precariedad son tan elevadas, que es difícil registrar una mayor caída.
Es decir, no necesariamente la baja en la pobreza laboral refleja una mejora en su mercado laboral, sino una cierta estabilización.
De acuerdo con Viridiana Ríos, directora de México, ¿Cómo vamos?, el crecimiento en este tipo de entidades donde no se tiene un Estado de Derecho se cimenta en dos mecanismos: A partir de recursos que provienen del exterior, como el gobierno federal, y debido a ciertas industrias extractivas que pueden sobrevivir en regiones con esa característica , como la minería.
Cuando una economía avanza mediante transferencias federales extraordinarias, no es un crecimiento que pueda ser sostenido, sino un respiro, porque depende completamente del erario federal, ni siquiera de su propia recaudación, explica.
Son los casos, precisamente, de Guerrero y Michoacán, que entre el 2013 y 2014 recibieron recursos federales extraordinarios. En el caso del primero para abatir las afectaciones de fenómenos naturales, mientras que en el segundo por el fondo para reactivar la actividad económica que se puso en marcha con el entonces comisionado Alfredo Castillo.
El Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP) proyecta, precisamente, la tendencia de la población ocupada que no puede adquirir una canasta alimentaria básica con su salario, es decir, el aumento o descenso de la precarización salarial. Este índice es elaborado por el Coneval.
A diciembre de 2014, una canasta alimentaria rural y urbana registró un costo de 914.89 y 1,291.92 pesos, respectivamente.