Alitas a la mexicana, con un toque internacional

Wings Army ha decidio marcar la diferencia en lo que a comida rápida se refiere. Esta franquicia ofrece las clásicas alitas de pollo hot wings pero con tres diferentes estilos: mexicano, asiático y estadounidense. Aunado a esta propuesta, este negocio además pensó en la estancia de sus comensales y sus fundadores decidieron dar una decoración única y especial donde predomina el camuflaje.

Martín Santaella Osuna, empresario de Guadalajara, comentó a El Economista que la idea de crear nuevas recetas para preparar las alitas le surgió por el gusto personal hacia el platillo, derivado de los constantes viajes que hace a los Estados Unidos.

“Así fue como me surgió la idea de tropicalizar este platillo al gusto de los mexicanos y convertir el negocio en franquicia”, dijo el creador y dueño de la franquicia, que a un año de operaciones ha logrado un éxito la ciudad de Guadalajara y una expansión considerable en los estados aledaños.

De la variedad de tipos de alitas que hay destacan, “la bomba” que esta hecha con cinco tipos de salsas picantes, “la cajun” que lleva una salsa media que al final de la preparación se espolvorea con un chile en polvo además de este tipo de salsas también cuentan con salsas agridulces .

Tomando en cuenta que la moda actual para vestir, entre los jóvenes, son las prendas militares y que estará presente en los siguientes años, el franquiciante decidió dar una ambientación militar a los locales de la franquicia, con paracaídas, redes, fotografías y demás artículos militares.

Compromiso con el inversionista

Para iniciar con una franquicia de Wings Army “se requiere un local mínimo de 80 metros cuadrados, que preferentemente esté en una zona comercial, cerca de una escuela o buen en una avenida principal”, dijo Santaella Osuna.

El local está dividido en tres áreas: la cocina donde se prepararán las alitas y que debe estar acondicionada con una freidora especial que es entregada por el franquiciante, una barra en la que se servirán bebidas y la zona de restaurante donde se colocaran mesas y sillas de acuerdo al tamaño del local.

Como franquiciante, comenta Santaella Osuna, “nos comprometemos a dar asesoría preoperatorio a nuestros franquiciatarios, cursos de capacitación para ellos y su personal, además de los manuales de operación, así como a realizar visitas programadas y espontáneas para revisar que se cumpla con los estándares de calidad y servicio que tenemos”.

Uno de los aspectos que le ha dado la preferencia de los clientes y que el franquiciante considera como aspecto primordial del negocio es la atención al cliente para lo cual se capacita a los empleados de la franquicia, tanto a los meseros cómo a los empleados de mostrador.

Aunque el ambiente en las franquicias es familiar, durante el día se reciben clientes de todas las edades, y durante la noche se tiene el mayor numero de visitantes que oscilan entre los 15 y 35 años.

"Vienen parejas a cenar y grupos de amigos a tomar una cerveza, platicar y escuchar música”, explicó el dueño del negocio.

Wings Army cuenta con dos franquicias propias en Guadalajara y tres más franquiciadas, para lo que resta de este año se espera la apertura de la franquicia en las ciudades de Los Cabos, Mazatlán, León y Querétaro, y “tenemos prospectos en Puerto Vallarta, Cancún y Aguascalientes”, dijo Santaella Osuna.

Numeralia

Cuota de franquicia: 250,000 pesos

Inversión Inicial: 850,000 pesos.

Regalías: 3% sobre ventas netas.

Cuota de publicidad: 2% sobre ventas netas.

Periodo de recuperación: 18 meses.

Vigencia de contrato: 10 años.

www.wingsarmy.com