Lectura 5:00 min
Consumo e inversión interna serán los motores en México: Bárcena
Control de la inflación, mayor expansión del crédito y flujo de remesas apoyan a la demanda interna.
Pese al entorno de incertidumbre mundial y de la contracción económica que registrarán por segundo año consecutivo América Latina y el Caribe, México alcanzará una expansión de 2.3% en el 2016, confirmó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
No es una tasa de expansión ideal, pero México continúa creciendo y no creemos que esta dinámica acelere el incremento de la pobreza, México sigue creando empleos, aunque son de menor productividad y menor alcance salarial , explicó la secretaria ejecutiva de la comisión, Alicia Bárcena.
Desde las oficinas principales de la Cepal, en Chile, destacó que es el desempeño del sector manufacturero de Estados Unidos lo que está provocando que no sea tan alto el PIB de México, pues está vinculado con las exportaciones mexicanas y de petróleo.
Explicó que el consumo e inversión privada interna han tenido un buen desempeño desde el 2015, en contraste con la demanda externa. Esto significa que han sido el motor de crecimiento que sostuvo la expansión económica desde el año pasado.
México es de los pocos países de la región que ha cuidado la inflación (...), incluso es de los que ha aumentado la tasa de interés en América Latina (...) Y esto ha favorecido, junto con la mayor expansión de crédito y el flujo de las remesas, a apuntalar al consumo , refirió.
Destacó el aumento de la inversión privada en el 2015, pero lamentó que se dirigió en su mayoría a maquinaria y equipo, lo que dificulta un impulso de esta expansión en el desempeño económico y en variables de orden social.
El año pasado las exportaciones dejaron de ser el motor de crecimiento de la economía y en cambio la expansión de 2.5% en el PIB resultó de un mayor crecimiento disponible en México, explicó.
Sensibilidad mexicana
La funcionaria destacó que México es más sensible a la volatilidad financiera externa y lo que pase en el vecino del norte, por ello va a contracorriente en la tendencia de la política monetaria regional.
Al interior del documento evidencian que las autoridades monetarias mexicanas al igual que sus pares en algunos países del sur usan las tasas de política monetaria como principal instrumento .
En consecuencia y por su prolijidad al efecto financiero, el Banco de México aumentó las tasas en tres ocasiones desde diciembre del 2015, en 1.25 puntos porcentuales.
Factores como el aumento de las tasas de fondos federales de Estados Unidos y la volatilidad de los mercados internacionales han incidido en la conducta de la autoridad monetaria .
Inflación, la gran diferencia
La secretaria de la Cepal explicó en la conferencia que la inflación de México y Centroamérica ha jugado a favor de la expansión del consumo.
Destacó que a diferencia de América del Sur, donde la inflación promedia 11.7%, excluyendo a Venezuela, en México apenas alcanzó 2.6% a mayo. La diferencia radica en el impacto de la depreciación cambiaria en precios generales, refirió.
En el documento prevén que persista la presión inflacionaria por la depreciación cambiaria regional, pese a anticipar precios de commodities a la baja.
Migración y libre comercio, ?en la mira
Para Alicia Bárcena, los dos grandes temas que tendrán impacto en la región una vez concluidas las elecciones presidenciales de Estados Unidos serán la migración y los tratados de libre comercio.
Destacó que es temprano para hacer cualquier diagnóstico pues apenas se están definiendo formalmente las candidaturas oficiales de los contendientes a la máxima magistratura de Estados Unidos.
Sin embargo, destacó la reciente reunión del más alto nivel entre México, Estados Unidos y Canadá y el anuncio que dio la cancillería mexicana sobre la disponibilidad de revisar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, a 22 años de su puesta en marcha.
Pero tendrá que definirse de aquí a fin de año la situación de Estados Unidos. Por ahora, no hay claridad , dijo.
Tirón a la baja en Sudamérica
En la revisión de expectativas, la Cepal estima una mayor contracción de la economía de América Latina y el Caribe, de 0.8% para este año.
El pronóstico contrasta con -0.6% estimado en abril. Este ajuste resulta del mayor deterioro que tendrán Argentina y Venezuela.
Así, sería el segundo año consecutivo en que la región registra una recesión, resultado también de la caída del comercio exterior y el debilitamiento de inversiones y consumo interno.
Con estas cifras, lo que se puede anticipar es que será más caro el financiamiento , dijo. La funcionaria destacó que no se puede dar un diagnóstico homogéneo sobre la situación de la economía regional.
Sudamérica es el bloque más afectado por el tirón a la baja que otorgan Argentina, Brasil, Ecuador y Venezuela, reconoció. Para Brasil estimó una contracción de 3.5%, igual a la que tenía en abril.
Los países de la región que más crecerán serán República Dominicana, con una expansión de 6%; seguido de Panamá, cuya tasa de crecimiento la estima en 4.9%, y Bolivia, que tiene una previsión de un PIB de 4.5 por ciento.