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Confianza del consumidor se deterioró en medio de la quinta ola de Covid
La caída de 1.7 puntos que se presentó en julio, prende las alertas sobre la cautela con la que podrían responder los consumidores ante un panorama que se complica velozmente.
La confianza del consumidor en México volvió a sufrir un descalabro en el mes de julio, en medio de la quinta ola de contagios por el Covid-19 y la persistencia de las presiones inflacionarias que le pegaron al bolsillo de los mexicanos.
De acuerdo con los datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), que mide el sentir de los ciudadanos respecto a la economía, se ubicó en un nivel de 41.3 puntos en el séptimo mes del año. Con esto, el ICC toca su menor nivel desde marzo del año pasado, cuando registró 40.8 puntos.
En comparación con el mes de junio, la confianza de los consumidores registró una disminución de 1.7 puntos, con lo que registró su tercer mes consecutivo de retrocesos, y profundizó su caída.
“Normalmente, las variaciones suelen ser de menos de 1.0 punto, por lo que la caída de 1.7 que se presentó en julio, prende las alertas sobre la cautela con la que podrían responder los consumidores ante un panorama que se complica velozmente y en el que las fuertes presiones inflacionarias han logrado sostenerse por varios meses”, señaló Marcos Daniel Arias, analista de Monex.
En julio, el país se vio afectado por la quinta ola de Covid-19, causada por las subvariantes más contagiosas de Ómicron, con lo cual los contagios escalaron rápidamente y superaron los niveles reportados en olas pasadas.
A la par, el poder adquisitivo de los hogares mexicanos continuó siendo afectado por la persistencia de los altos niveles de inflación. De acuerdo con los datos del Inegi, en la primera quincena de julio la inflación alcanzó un nivel de 8.16%, el mayor en más de dos décadas.
“La caída (de la confianza) registrada en julio va de la mano con las crecientes preocupaciones de que la economía de Estados Unidos se encuentre cerca de caer en una recesión, lo cual llevaría a México a entrar en una recesión también. Dado el fuerte vínculo comercial entre ambos países, una recesión en Estados Unidos tendría un fuerte impacto en el sector manufacturero mexicano, que ha sido el principal propulsor del crecimiento en la recuperación económica post pandemia”, agregó Alfredo Sandoval, analista de Banco Base.
Hacia adelante, los analistas no descartaron que el ICC se vea afectado por las noticias sobre una posible recesión, no sólo en México y Estados Unidos, sino también a nivel global.
En las últimas semanas las noticias de una posible recesión en Estados Unidos han prendido las alertas a nivel internacional, sobre todo por ligar dos trimestres con contracciones, lo que en teoría es una recesión técnica.
Componentes en deterioro
El reporte del Inegi, que elabora de manera conjunta con el Banco de México (Banxico), mostró que los cinco componentes del ICC mostraron reducciones en su comparación mensual en julio.
La mayor caída se dio en los componentes que se enfocan en la percepción económica futura. Respecto a la situación económica esperada, en un año, para los miembros del hogar, ésta cayó 2.1 puntos, mientras que la esperada para el país se deterioró en 2.0 puntos en julio.
“Esto podría estar relacionado a la amplia difusión que tuvieron las noticias sobre la posible recesión en Estados Unidos y el mundo, lo que habría sembrado la expectativa de que el contagio llegaría a México en poco tiempo”, explicó el analista de Monex.
El sentir sobre la situación económica actual del país también sufrió un retroceso. En julio, este componente mostró una caída mensual de 1.3 puntos.
En tanto, las posibilidades de compra de muebles y electrodomésticos disminuyeron en 1.1 puntos, mientras que la percepción de la situación económica actual de los miembros del hogar presentó una disminución de 0.7 puntos.
Leve mejora en optimismo para comprar auto
Dentro de los indicadores complementarios del ICC, de los 10 que considera el Inegi, sólo el que se refiere a las posibilidades de compra de un automóvil mostró un crecimiento mensual de julio, pero fue de tan sólo 0.3 puntos, para ubicarse en un nivel de 12.3 puntos, el menor de todos los indicadores.
En tanto, la mayor caída se dio en la percepción del empleo en los siguientes 12 meses, con un deterioro de 2.2 puntos, seguida de la situación económica personal futura con un retroceso de 1.9 puntos.
Otras caídas significativas fueron las posibilidades económicas futuras para salir de vacaciones, así como la posibilidad de ahorrar, con un retroceso de 1.5 puntos cada uno.
