Buscar
Deportes

Lectura 3:00 min

Laurent Fignon, el profesor del ciclismo

Ayer, el ciclista francés murió de cáncer en París

El objetivo de Laurent Fignon en el inicio de la temporada ciclista de 1983 era impensable: pelearle el liderato del equipo a Bernard Hinault. No era sencillo enfrentar a uno de los monstruos del ciclismo de todos los tiempos, pero no era una preocupación para él.

Fignon debutó en el ciclismo profesional a los 22 años. Su calidad como ciclista amateur la avalaron sus más de 50 victorias. El profesionalismo era el siguiente paso y Laurent la concretó en 1983.

Ese año llegó a la cima del ciclismo profesional en la edición 70 del Tour de Francia y de paso se convirtió en el corredor más joven en ganar la prueba desde 1933 y el último corredor francés en lograrlo.

Por su destreza, habilidad sobre la bicicleta, por su apariencia -usaba lentes, inusuales para correr en aquel tiempo- y su larga cabellera, a Fignon le apodaron Le professeur (el profesor ).

Su primer gran lección fue derrocar a Hinault, su líder en 1983, y la segunda enfrentarlo en 1984 y superarlo.

Hinault cambió de equipo y quería ganar el Tour, pero Fignon no se lo permitió. Ganó cinco etapas y se erigió como la nueva estrella del ciclismo francés.

Pero no todas sus lecciones fueron triunfos. La tercera la dio junto al estadounidense Greg LeMond. Ambos disputaron intensamente el Tour de Francia 1989 y Lemond se impuso a Fignon con una diferencia de ocho segundos, la más reducida de toda la historia. El francés se consoló ganando el Giro de Italia de aquel año.

Sólo cuatro años más pudo estar Fignon como profesional. Se retiró en 1993 tras cumplir 11 temporadas.

Hace un año en entrevista con el semanario Paris Match dijo que había sido diagnosticado con cáncer de pulmón un año antes y que dos sesiones de quimioterapia no le había reducido el mal. Estaba empezando una tercera y Fignon dijo en tono pesimista.

A pesar del tratamiento de más de siete meses, mi cáncer se ha reducido a duras penas , declaró. No importa mi fuerza de voluntad, si no encontramos un buen tratamiento, el cáncer me abruma y moriré. No quiero morir a los 50, pero si no es curable, ¿qué puedo hacer? .

En su libro Eramos jóvenes y despreocupados, publicado en el 2009, reconoció haber consumido anfetaminas durante su carrera, aunque él y los doctores aseguraban que no tenía relación directa con su enfermedad.

Me encanta la vida. Me gusta reir, viajar, leer, comer bien, al igual que un buen francés , continuó. No tengo miedo de morir, es sólo que no estoy dispuesto a morir .

Únete infórmate descubre

Suscríbete a nuestros
Newsletters

Ve a nuestros NewslettersREGÍSTRATE AQUÍ
tracking reference image

Últimas noticias

Noticias Recomendadas

Suscríbete