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Locura de su hija inspiró última obra de Joyce

Poco se sabe de la locura que rondó la vida del autor irlandés James Joyce y que se posó en su hija Lucía, quien tras ser rechazada por Samuel Beckett acabó esquizofrénica.

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Famoso por sus novelas 'Ulises' y 'Finnegan's Wake', poco se sabe de la locura que rondó la vida del autor irlandés James Joyce y que se posó en su hija Lucía, una promisoria bailarina, escritora y actriz que, dicen, tras ser rechazada por Samuel Beckett acabó esquizofrénica.

El psicoanalista Pablo Fuentes publicó a finales del año pasado un interesante artículo en el que aborda la oscura relación de Joyce con Lucía, a quien llamaba su 'Maravilla salvaje'.

'Joyce -señala el texto publicado en una página argentina de Internet- estaba seguro de que Lucía iba a salir de la noche de la locura cuando él terminara el Finnegan’s Wake , que llamaba el libro de la noche'.

James Joyce, comenta Fuentes, 'negaba la locura de su hija, la veía más bien como una artista frustrada e incomprendida; decía que solamente él la entendía, que compartían el mismo lenguaje'.

Aunque su familia y después sus biógrafos han sostenido que la muchacha no era más que 'una pobre loca, bizca, problemática, que arruinó la salud y las finanzas del padre con sus extravagancias, arrebatos y múltiples tratamientos, desde médicos y psiquiátricos hasta los más exóticos que consumieron toda su vida'.

El psicoanalista observa que no obstante que los estudiosos dicen que la inspiradora de Joyce fue su esposa Nora Barnacle, la madre de la loca, secretamente él puso a Lucía en el centro, 'ella fue el faro iluminador de su obra maestra final, cuya difícil realización avanzaba en contrapunto con el deterioro psíquico de su hija'.

Joyce, quien falleció hace 70 años, el 13 de enero de 1941, es catalogado como uno de los escritores más importantes e influyentes del siglo XX, y es recordado por el sutil y veraz retrato de la naturaleza humana, que logró plasmar en sus obras, su maestría en el uso del lenguaje y su brillante desarrollo de nuevas formas literarias.

La crítica destaca que aún cuando su universo literario está fuertemente enraizado en su natal Dublín, logró trascender y ejercer una influencia decisiva en toda la novelística del siglo pasado, principalmente a partir de su obra cumbre "Ulises".

Nació el 2 de febrero de 1882, hijo del funcionario Juan Stanislaus Joyce, un caballero empobrecido que falló en un negocio de destilería y realizó toda clase de profesiones y actividades, desde la política hasta la recaudación de impuestos.

La madre del novelista fue Mary Jane Murray, pianista 10 años menor que su marido, quien luchó por mantener la imagen de clase media de su familia, muy a pesar de la pobreza.

Joyce cursó estudios con los Jesuitas y en la Universidad de Dublín, donde obtuvo su primer éxito literario a los 18 años de edad, con su artículo "El nuevo drama de Ibsen".

Tras graduarse en 1902, el joven viajó a París para trabajar como periodista, profesor y en otras ocupaciones bajo condiciones financieras difíciles.

Al año de estar viviendo en Francia, recibió un telegrama debido a que su madre estaba a punto de morir; poco después del deceso, el escritor regresó a París apesadumbrado, aunque luego volvió a Dublín.

Allí conoció a Nora Barnacle, una campesina que provenía de Galway, con quien se casó y vivió en Trieste, París y Zúrich, lugares a donde se mudaron con sus dos hijos debido a la Primera Guerra Mundial (1914-1918).

En 1907, año en que sufrió un ataque de iritis que casi lo dejó ciego, logró su primer libro, "Música de cámara", texto compuesto por 36 poemas de amor influenciados por la poesía lírica isabelina y los poetas líricos ingleses de finales del siglo XIX.

Su segunda obra fue "Dublineses", en 1914, un libro de 15 cuentos donde narra episodios críticos de la infancia, la adolescencia, la familia y la vida pública de Dublín; "Retrato del artista adolescente", de 1916, fue su primera novela, con mucho contenido autobiográfico.

En 1918 escribió su obra de teatro "Exiliados", aunque la verdadera fama apareció con "Ulises", obra basada en la "Odisea", de Homero, la cual relata la búsqueda simbólica del hijo de Bloom y la conciencia emergente de 'Dedalus' de dedicarse a la escritura.

La revista estadounidense "Little Review" publicó los capítulos del libro ese mismo año, aunque en 1920 fue prohibido y finalmente difundido en 1922, en París, hasta estar legalmente disponible en Gran Bretaña y Estados Unidos en 1933.

En 1923, Joyce comenzó en París el primer segmento de su última novela "Finnegan's Wake", misma que apareció en la revisión transatlántica de Ford Madox Ford, en abril de 1924, para que la versión final fuera publicada hasta 1939.

Esta obra fue escrita en forma de una serie ininterrumpida de sueños que tienen lugar durante una noche en la vida del personaje 'Humphrey Chimpden Earwicker'.

Con "Finnegan's Wake" llevó su experimentación linguística al límite, al crear un lenguaje que combina el inglés con palabras procedentes de varios idiomas que los críticos consideraban una obra maestra, pero que muchos lectores encontraban incomprensible.

Otras de sus obras publicadas son: "Poemas, manzanas" (1927) y "Collected Poems" (1936), ambos libros de poesía; además de "Stephen, el héroe", que salió a la luz en 1944.

Las innovaciones técnicas de Joyce en el arte de la novela incluyen un uso extenso del monólogo interior mediante una red compleja de los paralelos simbólicos extraídos de la mitología, la historia y la misma literatura.

Contrajo matrimonio legalmente hasta el 4 de julio de 1931, un año antes de que su hijo George les diera un nieto, al que llamaron Stephen, y de que su hija Lucía sufriera su primer ataque de esquizofrenia.

El 13 de enero de 1941, hace precisamente 70 años, Joyce falleció debido a una úlcera duodenal perforada, tras una intervención quirúrgica de urgencia.

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