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Mercados, crisis? y poder político
Hoy de lo que se trata es de cómo los gobiernos y? las instituciones internacionales pueden regular?los mercados para evitar otra crisis como la actual.
El funcionamiento de los mercados financieros es tan complejo que no puede ser abordado sólo por los especialistas que compran y venden valores con base en órdenes recibidas de los inversionistas.
También están los magos y los psicólogos que estudian comportamientos humanos asociados a la ambición.
George Soros, uno de los inversionistas que más sabe de los mercados financieros, dijo: Los mercados no reflejan muy bien los hechos, en parte, porque ellos mismos crean esos hechos . A esta consideración relevante habría que añadir otra en la misma tesitura: las realidades crean expectativas, pero éstas a su vez crean realidades. Esencialmente, estamos hablando de una nave inestable.
Los operadores actúan invirtiendo en valores una masa de recursos cuyo origen es múltiple, desde el ahorro de los inversionistas individuales hasta recursos gubernamentales.
Para que los mercados no afecten demasiado el rendimiento de los valores de los países que tienen deudas altas, los gobiernos están aplicando medidas draconianas en sus presupuestos, esto significa poner los gastos a niveles mínimos.
Si bien ayuda a ahuyentar los riesgos, tiene un efecto económico pernicioso porque los gastos suponen una forma de expresar el programa económico de los gobiernos.
El mercado presiona de manera clara para que los gobiernos reduzcan su participación económica. Lo hace mediante el precio de la deuda soberana y de las variables económicas para que estén en niveles que no representen un peligro. La austeridad como meta.
El problema que se ha creado a partir de que los mercados financieros fueron desregulados en Estados Unidos en el gobierno del Presidente Clinton es que son juez y parte, delicado en la coyuntura actual de recuperación. Ello se ha abordado, sin soluciones afortunadas, en el G-20.
La cuestión es de la mayor trascendencia porque de lo que se trata es de cómo los gobiernos y las instituciones internacionales pueden regular los mercados para evitar experiencias tan dolorosas como las que ahora se viven. Las burbujas y las crisis son globales.
Uno de los tres economistas que recibirán el premio Nobel de Economía 2013, Robert Shiller, reconoció hace unos días varias cuestiones importantes. Dijo: La teoría del mercado eficiente es una verdad a medias . Tiene razón, también reconoce la actual fuerza de los mercados sostenidos por los bancos centrales y todo el sistema financiero internacional. También mencionó: La gestión de inversiones ha sido una profesión que ha llevado aparejada mucha farsa, gente que dice que puede vencer al mercado y en realidad no puede .
La cuestión al día de hoy es la recuperación de la economía. Ante tantos condicionamientos de los mercados. Sobre todo al ver los efectos dañinos que la crisis y las políticas aplicadas para resolverla han deteriorado a las clases medias de Europa y de Estados Unidos. Los procesos de consolidación fiscal han deprimido a la actividad económica y han costado 8% del PIB en Grecia, 7%, en Portugal; 6%, en España, y así sucesivamente con otros países.
La solución que emerge es de un ajuste en los países de deuda alta más repartido en el tiempo porque tiene un efecto negativo menor.
emota_41@hotmail.com