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Vox sale a las calles en el día 1
La ultraderecha pide llevar a la cárcel a Puigdemont.
Madrid. Vox y la plataforma España Existe congregaron en distintas ciudades de todo el territorio nacional a centenares de personas para reclamar al gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos que respete el orden constitucional y la soberanía nacional y al presidente Pedro Sánchez la detención del presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, y su antecesor, Carles Puigdemont.
Durante las concentraciones se leyó un único manifiesto en el que exigían al nuevo Ejecutivo que “respete la soberanía del pueblo y la Constitución, que es lo mismo que exigir respeto por la libertad, la convivencia y la igualdad”.
En Madrid tuvo lugar una de las concentraciones más multitudinarias, en la plaza de Cibeles, donde se encuentra la sede del ayuntamiento de la capital. El encargado de leer el manifiesto en Madrid fue el líder de Vox, Santiago Abascal, que exigió al gobierno que, “tal y como prometió, combata a los enemigos del orden constitucional”.
Asimismo, en el manifiesto se instaba al presidente del gobierno a que “traiga detenido al golpista Puigdemont” y se pedía también que se detenga “al condenado Torra”.
En general, las concentraciones se desarrollaron sin incidentes reseñables, si bien en Barcelona se produjeron algunos momentos de tensión, al formarse en las inmediaciones de la plaza de Sant Jaume otra concentración contraria a la convocatoria que reclamaba la defensa de la soberanía nacional. Los Mossos d’Esquadra (policía autonómica) desplegaron un cordón policial para separar a manifestantes y a los Comités de Defensa de la República(CDR), que proferían gritos contra el fascismo.
Frente al acto de Vox, que congregó a cerca de 1,000 personas, según el ayuntamiento de Barcelona, los CDR convocaron a su vez a unos 300 simpatizantes, que llegaron antes a la plaza y que recibieron a los manifestantes de Vox con gritos contra el fascismo. Entre ambas manifestaciones, los Mossos desplegaron un cordón policial para mantener separados a los concentrados y controlaron los accesos a la plaza, a pesar de lo cual se produjeron algunos lanzamientos de huevos y de latas entre ambos grupos de manifestantes.
“Los fascistas campan libres por la plaza y los cuerpos de seguridad tienen encapsulados a quienes luchan contra el fascismo. Los fascistas tienen siempre un trato de favor y privilegiado y los antifascistas sufrimos la represión”, comentó Carles Riera, vocero de la CUP.