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Japón autoriza combatir por aliados
El cambio ampliará significativamente las opciones militares de Japón al poner fin a la prohibición de ejercer la "autodefensa colectiva", o de ayudar a un país amigo bajo ataque.
Tokio.- Japón dio el martes un paso histórico para alejarse de su pacifismo de posguerra al poner fin a una prohibición que ha impedido que los militares combatan en el extranjero desde 1945, una victoria para el primer ministro Shinzo Abe, pero también una decisión que ha irritado a China y que preocupa a muchos japoneses.
El cambio, el más dramático en política de defensa de Japón desde que el país estableció sus fuerzas armadas de posguerra hace exactamente 60 años, ampliará significativamente las opciones militares de Japón al poner fin a la prohibición de ejercer la "autodefensa colectiva", o de ayudar a un país amigo bajo ataque.
En declaraciones a los periodistas fuera del despacho del primer ministro, el ministro de Defensa de Japón, Itsunori Onodera, informó que el gabinete de Abe había adoptado el cambio, que también relaja las limitaciones sobre actividades en operaciones de paz lideradas por la ONU y en otros incidentes que no signifiquen una guerra a gran escala.
Las fuerzas armadas de Japón, limitadas por largo tiempo por la Constitución pacifista de la posguerra, se alinearán más con los militares de otros países avanzados, pero el Gobierno probablemente estará receloso de enviar tropas para operaciones multilaterales, como la invasión a Irak liderada por Estados Unidos en el 2003.
La nueva política está irritando a una China cada vez más enérgica, cuyos vínculos con Japón se han visto afectados por una disputa marítima, por la desconfianza y por el legado de agresiones militares pasadas de Japón.
"China se opone a que los japoneses inventen la amenaza china para promover su agenda política interna", dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China Hong Lei en una conferencia de prensa en Pekín.
"Exigimos que Japón respete las preocupaciones de seguridad razonables de sus vecinos asiáticos y que maneje prudentemente el tema relevante", agregó.
No obstante, el cambio será bienvenido por Washington, que ha instado durante largo tiempo a Tokio a que se vuelva un socio de alianza más igualitario, además de países del sudeste asiático que también tienen disputas con China.
Los conservadores japoneses afirman que el Artículo 9 de la Constitución, que renuncia a la guerra, ha limitado demasiado la capacidad de Japón de defenderse y que un cambio en el equilibrio de poder regional, incluyendo el surgimiento de China, significa que las políticas japonesas deben ser más flexibles.
A algunos votantes les preocupa que el país se involucre en guerras extranjeras y a otros les enfada lo que ven como la eliminación del Artículo 9 sin seguir procedimientos formales de enmienda.
La Constitución japonesa nunca ha sido revisada tras ser adoptada luego de la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial en 1945.
Desde entonces, los militares japoneses nunca han entrado en combate.
mac