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Dilma Rousseff asume presidencia de Brasil
La economista, de 63 años, juró este 1 de enero como nueva presidente de Brasil, la primera mujer en conducir los destinos del gigante sudamericano, y que sucede a Luiz Inácio Lula da Silva.
Brasilia.-La economista Dilma Rousseff, de 63 años, juró este sábado como nueva presidente de Brasil, la primera mujer en conducir los destinos del gigante sudamericano, y que sucede a Luiz Inácio Lula da Silva.
Minutos después de Rousseff, fue formalmente investido el nuevo vicepresidente de la República, Michel Temer, en una ceremonia realizada en el plenario del Congreso.
La comitiva de Rousseff llegó al Congreso Nacional bajo una lluvia torrencial que obligó a diversos cambios en la ceremonia, mientras en las afueras del Parlamento una multitud aplaudía y gritaba el nombre de la nueva presidenta.
Más tarde, Rousseff, se trasladará a la sede del gobierno, el Palacio de Planalto, donde el ahora ex presidente Lula le entregará la banda presidencial y ella entonces investirá formalmente a los integrantes de su gabinete ministerial.
Finalizada esa ceremonia, Lula abandonará inmediatamente la capital brasileña rumbo a su domicilio particular, en el estado de Sao Paulo (sur).
PROMETE PROTEGER A LOS MáS FRáGILES Y GOBERNAR PARA TODOS
La nueva mandataria asumió el compromiso ante el país de "proteger a los más frágiles" y "gobernar para todos", así como a consolidar los avances sociales de su predecesor, Luiz Inácio Lula da Silva.
En su primer discurso ante el Pleno del Congreso luego de asumir el cargo ante el titular del Senado, José Sarney, la flamante mandataria dijo que su elección como primera presidenta del país es un "homenaje a todas las mujeres brasileñas".
En su alocución, que constantemente fue interrumpida por espontáneos aplausos de los cientos de asistentes a la ceremonia de cambio de mando, Rousseff aclaró: "No vengo para enaltecer mi biografía, sino para glorificar a cada mujer brasileña".
"Mi compromiso es honrar a las mujeres, proteger a los más frágiles y gobernar para todos", aseveró la presidenta Rousseff, vestida con un elegante traje blanco.
Tras recordar que fue elegida en la segunda vuelta del 31 de octubre pasado, donde derrotó al opositor José Serra con 53 % de los votos "para comandar el país", la mandataria se comprometió a promover valores como la "justicia social" y la "creatividad".
Rousseff aprovechó además su primer discurso como jefa de Estado para rendir homenaje al ahora ex presidente Lula, su principal mentor político y con quien se desempeñó como ministra durante su gobierno (2003-2011).
"Vengo, antes que todo, para dar continuidad al mayor proceso de reafirmación que este país ha vivido en tiempos recientes, para consolidar la obra transformadora del presidente Luiz Inácio Lula da Silva", enfatizó la flamante mandataria brasileña.
Visiblemente emocionada, y con la voz a punto de quebrarse, subrayó que con Lula tuvo "la más vigorosa experiencia política" de su vida, lo que le permitió el "privilegio de servir al país en los últimos años".
"Un presidente (Lula) que cambió la forma de gobernar y enseñó al brasileño a confiar en su país. Con su liderazgo, el pueblo brasileño hizo la travesía hacia otro capítulo de nuestra historia. Mi misión ahora será consolidar ese camino", acotó Rousseff.
Luego de la ceremonia en el Congreso, la flamante mandataria brasileña se dirigirá al Palacio de Planalto, sede del Poder Ejecutivo, para recibir la faja presidencial de manos del ahora ex presidente Lula, su principal mentor político.
BVC