Lectura 4:00 min
Crece presión política para Nixon
No es la primera crisis que enfrenta el demócrata. Previo a Ferguson, en el 2011, una serie de violentos tornados azotaron la ciudad de Joplin, al suroeste de Missouri, matando a 161 y dejando más de 1,000 heridos.
El gobernador de Missouri, Jay Nixon (demócrata), se encuentra en medio de una tormenta de disturbios en Ferguson, St. Louis. Se le encomendó la tarea casi imposible de equilibrar los intereses de los manifestantes locales indignados por el tiroteo de un adolescente negro desarmado y el esfuerzo para mantener el orden.
Ayer en la noche, mientras los manifestantes se reunieron una vez más en las calles de Ferguson antes de un toque de queda de medianoche, tuiteó: Vamos a mostrar al mundo que podemos protestar pacíficamente y con pasión. Mantengamos #Ferguson a salvo esta noche . Dos minutos más tarde, la violencia estalló.
La nueva ola de violencia se produce semanas después de que Nixon, de 58 años, esparció rumores de que quería ser enviado en el 2016 a la Convención Nacional Demócrata. Pero en vez de terminar el verano con más reuniones y viajes fuera del estado, Nixon se estancó en Missouri y lucha para evitar el desastre, tanto para sus electores como en su propia carrera política.
En lo que se refiere al gobernador, creo que es demasiado pronto para decir que va a tener un impacto en su carrera. Ha tenido que tomar algunas decisiones difíciles , dijo la estratega demócrata Donna Brazile.
El fin de semana, Nixon utilizó una orden ejecutiva para instaurar un toque de queda de cinco horas que comienza a medianoche, sin determinar durante cuántas noches se llevará a cabo. El domingo por la noche, los manifestantes fueron expulsados por la policía con gases lacrimógenos, Nixon ordenó a la Guardia Nacional de Missouri unirse a la policía estatal y local, que han tratado de mantener la paz.
Sus defensores dicen que él está haciendo lo mejor en esta mala situación: coordinar a los funcionarios sobre las medidas que deben llevarse a cabo. Los críticos del gobernador de su propio partido están llorando ahora y estaban llorando antes de que ocurriera , dijo el representante estatal, Tommie Pierson (demócrata), presidente del Caucus Negro Legislativo. Hay mucha política en marcha, un montón de gente tratando de tomar ventaja. Pero no creo que su carrera esté dañada, por lo menos no en este momento. Él ha manejado esto lo mejor que pudo .
Otros han hecho referencia a la retardada respuesta de Nixon a la crisis en Ferguson, mencionando que sólo se pone en evidencia su falta de liderazgo.
Después de un breve descanso en el condado de St. Louis el martes pasado, las protestas se volvieron más violentas al día siguiente. Nixon canceló sus planes para asistir a la feria estatal el miércoles y llegó a Ferguson el jueves para realizar su primera conferencia de prensa completa sobre el tema, casi cinco días después del tiroteo.
Antes de eso, la senadora del estado de Missouri, Maria Chappelle-Nadal (demócrata), acusó a Nixon de no estar en contacto con los votantes negros: Él nunca ha estado en la Zona Cero , escribió en Twitter.
Las crisis, desde desastres naturales a aquellos ocasionados por el hombre, a menudo han servido como telón de fondo para los momentos definitorios en las carreras de figuras políticas, en particular las de gobernadores y alcaldes. La respuesta de Rudolph W. Giuliani a los ataques terroristas del 2001 en Nueva York sirvió como la base de su candidatura presidencial en el 2008. Mucho antes de ser elogiado por su respuesta al huracán Sandy, la imagen del gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, estaba casi arruinada por su decisión de permanecer en Disney World mientras una tormenta de nieve cubría su estado.
Ésta no es la primera crisis de Nixon, la cual ocurrió en el 2011, cuando violentos tornados azotaron Joplin, al suroeste de Missouri, matando a 161 y dejando más de 1,000 heridos, luego de la cual Nixon ganó elogios por limpiar y rehabilitar la ciudad, sus escuelas y otras infraestructuras.