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Instrumentos estructurados, nuevos aliados en mi inversión
Son herramientas sumamente flexibles que se pueden adaptar a diferentes necesidades de los inversores y sus diferentes perfiles.
Qué difícil se ha vuelto encontrar una inversión que pague rendimientos atractivos de forma mensual y sin arriesgar capital, o simplemente que pague por arriba de la inflación (una tasa real positiva).
Si invertimos en instrumentos de corto plazo como el Cete seguramente terminaremos por obtener rendimientos reales negativos, es decir, la inflación será superior a los intereses generados y nuestro dinero perderá valor.
Sin duda alguna, el actual entorno de tasas de interés tan bajas obliga a los inversionistas a buscar alternativas de inversión con mejores rendimientos que los productos en los cuales invertían hace algunos años, sobre todo si pensamos en inversionistas conservadores y que no están dispuestos a asumir mayores riesgos en sus portafolios que los que representan los instrumentos de deuda a corto plazo como los Cetes.
Por otra parte, hay inversionistas con un perfil más agresivo que buscan instrumentos con más riesgo y mucho más rendimiento como el mercado de renta variable a través de acciones, índices o ETFs.
Pero, ¿no sería fantástico si pudiéramos encontrar una inversión que combinara lo mejor de los dos mundos? Que me proteja el capital y, además, me pague un rendimiento superior al de la inflación.
Imagínese un instrumento que me pague un rendimiento atractivo si la Bolsa sube, pero también me lo pague en caso de que la Bolsa sufra una caída.
Pues bien, los productos estructurados pueden ofrecer esto y muchas otras variantes acordes al objetivo y perfil de cada inversionista.
Los estructurados son instrumentos de inversión sumamente flexibles que se pueden adaptar a diferentes necesidades de los inversionistas y sus diferentes perfiles, por ejemplo: preservar el capital, generar flujo de efectivo periódicamente, obtener rendimientos con mercados a la baja o bien potencializar ganancias con mercados a la alza.
Los instrumentos estructurados, también conocidos como notas estructuradas, y en algunos casos warrants, se encuentran ligados o sujetos al comportamiento de uno o varios activos (mejor conocidos como subyacente) tales como: una acción, un par de divisas (MXN/USD), una tasa como la TIIE o un índice accionario, entre otros. El éxito o fracaso de estos productos siempre dependerá del desempeño del activo al que está referenciado; por ejemplo, una estructura que paga un interés mensual siempre y cuando el tipo de cambio (peso/dólar) no toque equis nivel en una determinada fecha. En este caso el subyacente es el tipo de cambio MXN/USD.
Estos novedosos vehículos de inversión son cada vez más utilizados en el mercado mexicano. Comienzan a ser un componente importante en los portafolios y las carteras de las personas físicas y morales, en función del riesgo, rendimiento y horizonte de inversión de cada una de ellas.
Estos instrumentos complementan las diferentes estrategias y otorgan una mayor diversificación a quienes los utilicemos, porque además de elegir el activo también podemos elegir la estructura adecuada con la que incluyamos dicho activo en nuestro portafolio.
Lo invito a conocer y considerar este tipo de productos en sus futuras inversiones.