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Apertura de una cuenta bancaria impactará en educación financiera de jóvenes: ABM
El programa de capacitación financiera está enfocado en 2.6 millones de beneficiarios.
Un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Por ello, la apertura de cuentas bancarias para adolescentes de 15 a 17 años impactará en su educación financiera, afirmó Juan Luis Ordaz Díaz, coordinador del Comité de Educación Financiera de la Asociación de Bancos de México (ABM).
Aunque falta la aprobación por parte del Senado para avalar la propuesta de que los adolescentes puedan tener su propia cuenta sin contar con la autorización de sus padres, el también directivo de Educación Financiera de Citibanamex consideró que, aunque el objetivo es bueno, debe trabajarse en el entrenamiento de estos futuros usuarios para que posteriormente conozcan otros servicios financieros.
Como parte de la iniciativa Jóvenes Construyendo el Futuro, el directivo reveló que es una gran oportunidad de acercamiento de los bancos con los jóvenes, a través de capacitaciones que estas instituciones darán con la finalidad de adentrarse al sistema financiero, para que conozcan el comportamiento de la banca a través de un tutor.
¿La apertura de una cuenta bancaria y la entrega de una tarjeta ayudará a los jóvenes a mejorar su educación financiera?
Mucha de la educación financiera es práctica. De acuerdo con investigaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, cuando las personas tienen acceso a una cuenta bancaria tienen mayor posibilidad de tener una mejor educación en este sector.
Datos de la prueba PISA muestran que aquellos jóvenes que tienen mejor educación financiera cumplen con dos características: tienen acceso a una cuenta bancaria y en su casa la familia habla sobre dinero y el aprendizaje del ahorro. La iniciativa tiene como objetivo dar a los jóvenes la posibilidad de tener acceso a una cuenta bancaria, lo cual tendrá un efecto en su educación financiera.
Si bien la iniciativa es un buen inicio, hace falta trabajar directamente en otro de los componentes, que es la educación directa, a través de darles el entrenamiento para que manejen estos productos y otros servicios financieros de forma adecuada.
¿La entrega de este plástico debe ir acompañada de algún taller o plática para que el joven empiece a adentrarse en el sistema financiero?
Varias de las instituciones financieras tienen este tipo de programas donde se brindan recomendaciones básicas al momento de la apertura, y en algunos casos se otorgan trípticos donde hay información respecto al manejo de estas cuentas. Algunas instituciones llegan a profundizar con talleres y cursos más avanzados en donde se explica detalladamente el uso de los productos financieros.
Hay una iniciativa hecha por integrantes de la ABM para sumarse al programa Jóvenes Construyendo el Futuro del gobierno federal. En ésta, los jóvenes que van a participar dentro del proyecto de todos los bancos van a recibir entrenamiento en temas financieros. Entonces serán capacitados en todos estos temas, y la intención es que a su vez ellos capaciten a otras personas, incluso si son beneficiarios del mismo programa.
El programa está enfocado, obviamente, a los jóvenes, y su meta es llegar a 2.3 millones de chicos que se incorporarán a laborar y 300,000 que estudian, dando un total de 2.6 millones de beneficiados.
La idea es que todos los jóvenes que participen dentro del programa, a través de la ABM, y que van a participar en las diferentes instituciones bancarias, se capaciten en estos temas.
¿Cómo serán las capacitaciones?
Los jóvenes recibirán una capacitación en dos vertientes: la primera en temas de desarrollo personal, como superación, oratoria, confianza, y la segunda en cuestiones financieras.
Como parte de esta capacitación, conocerán el funcionamiento del sistema financiero, el comportamiento de la banca y tendrán una capacitación práctica, es decir, en cada una de las instituciones financieras van a desempeñar actividades como la capacitación que van a estar dando a otras personas. Pueden ser beneficiarios, alumnos o trabajadores.
Como parte del programa, van a contar con un tutor, empleado de cualquiera de las instituciones bancarias, que le brindará acompañamiento y asesoría. Los apoyará a lo largo de su entrenamiento y será su mentor.
Buscamos que sea alguien que les represente un ejemplo. Está demostrado que cuando los jóvenes tienen un tutor puede tener un efecto aspiracional.
¿Habría algún otro requisito adicional que tuviera que cumplir el joven al momento de abrir su cuenta?
Por ahora se les va a depositar el recurso a través de cuentas bancarias, y ya si quieren acceso a otro tipo de cuentas, dependerá de los requisitos que tenga cada institución bancaria.
¿Podrán tener acceso a la banca móvil y banca por Internet a través de estas cuentas?
Dependerá de las instituciones que participen y qué tanto usen este servicio. La ABM colabora con el gobierno para poder impulsar este programa.
La iniciativa enviada por el presidente está enfocada en adolescentes entre 15 y 17 años. ¿Qué va a pasar con los jóvenes que cumplan la mayoría de edad? Es decir, se le da la tarjeta a un chico de 17, cumple la mayoría de edad, ¿habrá un cambio en las tarjetas o seguirá siendo el titular?
Hoy los jóvenes pueden, dependiendo de la institución bancaria, tener acceso a una cuenta, como chicos menores de 12 años. La diferencia en este caso es que el joven va a poder abrirla siendo el titular y sin un tutor de por medio.
Actualmente, debe acudir con uno de sus padres, quien es el responsable y es una cuenta vinculada a la cuenta del titular.
La idea de esta iniciativa es que algunos chicos ya trabajan, algunos cuentan con una beca, al final ya reciben algún tipo de ingreso y tienen que abrir una cuenta a través de sus padres. La idea de la propuesta es que la abran sin el apoyo de ningún tutor.
Hay algunas cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores que nos muestran que 21% de los jóvenes entre 18 y 30 años tiene una tarjeta de crédito y sólo 1% tiene un crédito hipotecario. Este será uno de los objetivos que pueda impulsar este programa.
Algunos jóvenes ya cuentan con plásticos como parte del programa de becas. Estos plásticos no están personalizados. ¿Esas tarjetas podrían servir como su primera tarjeta, que ellos sean los titulares, o tendrían forzosamente que sacar otra?
Esas tarjetas son de débito, les sirven como si fuera una de nómina, en donde se le deposita el apoyo o beca. La puede usar para hacer pagos o para retirar los recursos. Aquí la cuestión es que una vez que se deja de recibir el apoyo, a lo mejor el joven puede dejar de usar esa tarjeta y a lo mejor no necesariamente continúa con esa cuenta.