La SEP donará tabletas a alumnos desconectados de Internet

El plan de la Secretaría de Educación Pública (SEP) de llevar a los alumnos de primaria a la sociedad de la información con la donación de tabletas electrónicas podrá ser noble y necesario, pero sus resultados están en duda ante la menguante infraestructura de telecomunicaciones con que cuentan los colegios y, sobre todo, porque los beneficiarios se cuentan entre los que tienen menor acceso a la red.

México se encuentra a la cola en el acceso a Internet. El segmento poblacional de mexicanos con edades entre los 6 y 11 años de edad, estos últimos los directamente beneficiarios de la SEP, ha ido ganando terreno en la inclusión digital, pero en otros países ya son nativos digitales, según las consultoras The CIU y Telconomia.

Para cumplimentar su programa, la SEP deberá sortear el recorte al gasto público, que le quitó 7,800 millones de pesos de presupuesto para el 2015, y esquivar la posibilidad de que las donaciones se manchen con tintes electorales (en dos de los 15 primeros estados beneficiados habrá elecciones para gobernador y en 13 más, renovación de alcaldías y congresos). También deberá ponerse en sintonía con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (STC) para dotar con estos equipos a los alumnos de cuyas escuelas ya cuentan con accesos a Internet a través de programas gubernamentales como e-México o @prende.mx, de lo contrario, su estrategia de inclusión digital correrá con poca suerte para lograr el éxito.

Muestra de la caja en la que se entregarán las tabletas

La SEP se encuentra en el proceso para comprar 1 millón 140,000 tabletas y cerca de 45,000 accesorios para entregarlos a los alumnos de quinto grado de 15 estados del país a más tardar en junio, en el mismo mes de las elecciones intermedias que se realizarán en todo el país.

Los costos de estos equipos, según estimaciones del mercado al mayoreo, rondan los 99 dólares, por lo que la dependencia deberá erogar alrededor de 1,705 millones de pesos, una cifra considerable si para el año 2015 tendrá un recorte de 7,800 millones de pesos a su presupuesto.

Mala o deficiente infraestructura

Los retos tecnológicos se encuentran en dos rubros para la SEP. El primero tiene que ver con el ecosistema que soportará las conexiones de estos aparatos en los centros educativos. Si no los tienen, los colegios deberán contar con routers y otros equipos de telecomunicación como antenas que lleven las señales a las tabletas.

El reto para la SEP en cuanto a infraestructura deriva de que las poco más de 200,000 escuelas que operan en el país, más de 100,000 no cuentan con ningún tipo de conexión a Internet; 18,564 tampoco cuentan siquiera con energía eléctrica. Y en algunos casos las condiciones precarias se acentúan, por ejemplo, 36,264 se carece de agua, 14,444 no tienen pizarrones en todos sus salones de clases y en otros 20,152 escasean los sanitarios, según datos de la misma SEP y el INEGI al cierre del 2013, divulgados en marzo del 2014.

Un aliciente en cuanto a infraestructura conectada, es que la SCT logró en octubre del 2014 llegar a 65,149 sitios públicos conectados en todo el país. Según la dependencia, 74% de esos puntos corresponden a centros educativos, 12% a centros de salud, 8% a centros comunitarios y 5% a oficinas de gobierno.

La mitad de esos 65,149 sitios conectados comparten vía Wi-Fi sus conexiones a Internet. 75% del total los sitios se encuentran en los municipios que igualmente han sido beneficiados por el programa social Cruzada contra el hambre.

Pese a este avance, se encuentra lejos el objetivo de contar con 250,000 sitios públicos conectados para el año 2018.

El otro problema de fondo es el de la conectar a los jóvenes. La SEP pretende dotar de tabletas a los alumnos de quinto grado de Colima, Distrito Federal, Estado de México, Puebla, Sonora y Tabasco en la primera quincena de junio.

En todos los estados mencionados, salvo en Puebla, cerca de un tercio de los estudiantes difícilmente cuentan con manera de ingresar a la red; en Puebla, 70% tiene esas dificultades, de acuerdo con estimaciones de Telconomia.

En Colima, por ejemplo, en un análisis de Telconomia en el grupo de edad de entre 6 y 11 años, al comienzo del 2015 había 303,856 niños con la posibilidad de acceder a Internet, pero de ellos 142,602 sí usan la red, 159,220 no tienen manera aunque sepan usar este servicio y otros 2,034 no tienen conocimiento de cómo usar Internet.

En Puebla, en el mismo rango de edad, hay 766,548 niños con posibilidad de usar Internet, pero cerca de 532,000 no lo usan.

Para el caso del Distrito Federal la muestra de Telconomia arroja resultados opuestos a los que presenta Puebla. En la capital del país había al comenzar el año 798,147 menores con posibilidades de ingresar a Internet, pero 263,144 no tienen manera, mientras que 535,003 niños sí pueden acceder a la red.

Este programa tiene un componente pedagógico, pero un programa de tabletas como este tiene que estar apoyado por capacidades de red en los centros escolares, sobre todo si va a un número grande de alumnos. Esta capacidad, más que existan más conexiones, es relevante para el uso deseado de las tabletas , dijo Jesús Romo, analista en Telconomia.

En su último informe sobre la penetración de Internet en el país, la Asociación Mexicana de Internet (Amipci) informó que los menores que tienen entre 6 y 12 años, el mismo grupo donde se encuentran los beneficiados con las tabletas de la SEP, representan el 12% de los internautas en México.

La Amipci sostuvo también que la población de ingresos medios bajos representa el 46% de los internautas, y el 7% quienes pertenecen al segmento de ingresos bajos.

características de las tabletas

Los dispositivos que tendrán un costo de 99 dólares por unidad cuentan con una memoria externa de hasta 64 Gb, Bluetooth y Wifi, entre otras especificaciones.

*La misma banda que el gobierno utilizará para prestar servicios móviles de nueva generación para fines sociales, médicos y de educación a distancia.

Fuente: El Economista / sep

Para The Competitive Intelligence Unit, el segmento de los jóvenes menores de 16 años representa al 9.6% de los internautas, la menor cuota, pero también la que avanza con mayor rapidez. El segmento de entre 21 y 25 años de edad es el mayor grupo: 20%, según The CIU.

Gonzalo Rojón Álvarez, socio director en The CIU, pide dar un voto de confianza a las autoridades educativas, dado que la conectividad es baja y cualquier iniciativa aumentará los niveles de penetración, al final, un beneficio para los mexicanos.

Puede decirse que no tendrán Internet (fuera del colegio), pero sí habrá red en una plaza, por ejemplo; debe comprenderse que el gobierno trabaja paralelamente. Debe tomarse como que es un importante esfuerzo, que las capacidades (de infraestructura) no están tan buenas, pero que es un paso para cerrar la brecha digital en el país , estimó el especialista.

Donaciones sin claridad

La SEP no ha informado con precisión cuántas escuelas o alumnos contarán con la posibilidad de estrenar una tableta en junio en el salón de clases.

De acuerdo con datos de la SEP, en el Distrito Federal hay 8,166 escuelas; 19,765 en el Estado de México, 4,315 en Sonora, otras 4,956 en Tabasco, 11,857 en puebla y 1,088 en Colima, todos serán los primeros estados en beneficiarse con la entrega de tabletas electrónicas en la primera quincena de junio.

En cuanto a estudiantes, en todos los niveles, se encuentran inscritos 3 millones 424,000 en el Estado de México, 1 millón 687,000 en el Distrito Federal; 1 millón 637,000 en Puebla; 594,000 en Sonora, otros 553,000 en Tabasco y 140,000 en Colima.

La SEP debe evaluar todos los escenarios posibles que conduzcan o no a buen puerto a su programa de inclusión y educación digitales, porque la experiencia dicta que los costes son más que los resultados positivos, estimó José Otero, director para América Latina y el Caribe de 4G Americas.

La experiencia indica que regalar computadores o tabletas a niños de escasos recursos tiene un impacto nulo si el dispositivo no va acompañado de otros elementos como un software educativo relevante para el grado escolar del niño; capacitación a los maestros, conexiones eléctricas y a Internet apropiadas en los centros educativos.

En otras palabras, lo fácil es entregar el dispositivo. Lo difícil es mantener el apoyo constante en capacitaciones y desarrollo de contenidos para que los niños puedan beneficiarse del acceso a las tecnologías de información y comunicaciones , mencionó José Otero.

El uso de la tecnología en el día a día sólo se incrementará en los próximos años, añade el experto en su blog personal. Es un futuro inevitable que ya obliga a gobiernos, empresas y sociedades replantear las estrategias de conexión a Internet y su posible éxito o fracaso.

Por ahora, agregó Gonzalo Rojón, analista en The CIU, el programa de entrega de tabletas puede ser un buen ejercicio para conectar a más mexicanos a Internet y adentrar a los estudiantes a las nuevas tecnologías, que faltará todavía mucho, que las capacidades no son tan buenas, que los alumnos, tal vez, no tienen la conexión a Internet, pero ahora sí el acceso desde un dispositivo, porque así, frenando el programa, no tienen ni una ni la otra posibilidad; cuestión de medir resultados .

nicolas.lucas@eleconomista.mx

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