Los 4,400

La idea es buena: en los últimos 60 años han sido abducidas 4,400 personas y, un día del 2004 cuando se estrenó la primera temporada de la serie televisiva , esos hombres y mujeres reaparecen, sin haber envejecido ni recordar en donde estuvieron, a las orillas de un lago en la ciudad de Seattle, EU, y poco a poco el televidente se entera que cada uno de los retornados posee una habilidad paranormal: ver el futuro, curar con las manos, leer el pensamiento, la telequinesis, la invisibilidad, la telepatía, el poder sobre el fuego, el agua y las mentes, el conocimiento de conspiraciones mediante la escritura creativa, etcétera, y los conflictos que ello produce en el resto de la humanidad.

Imaginada y escrita por Scott Peters y René Echevarria, producida por la CBS y en la que participaron cualquier cantidad de directores, Los 4,400 sumó cuatro temporadas, es decir, 45 capítulos de 45 minutos cada uno y su cancelación se debió a una fuerte caída del teleauditorio en el 2007, lo que a la postre dejó cabos sueltos que derivarían en la publicación de cuatro libros que, de alguna u otra manera, trataron de cerrar las diversas historias que habían quedado incompletas.

En el portal Marcianitos Verdes ustedes perdonarán, pero fue el primer sitio de Internet que abrí que hablara sobre abducción , en una nota del 20 de mayo del 2012, firmada por Jonathan Monti, se asegura que la Organización Roper, una de las más importantes compañías estadounidenses de opinión pública, dio a conocer en la primera página del Wall Street Journal los resultados de un estudio estadístico, que pretendía establecer el número potencial de abducidos (secuestrados por extraterrestres) en la Unión Americana .

Agrega: La conclusión a la que se llegó es que 2% de los encuestados podría haber sido víctima de un secuestro extraterrestre. Si ese porcentaje se aplicase al grueso de la población norteamericana, el resultado sería de 3 millones 700 mil posibles abducidos .

Abducidos o no, el tema es al menos parte del imaginario colectivo estadounidense y países de influencia , y también es, en dicho ámbito, en el que Los 4,400 marca de inicio un punto sorpresivo o favorable entre la teleaudiencia: los secuestradores no son extraterrestres sino terrícolas, bien a bien no se sabe si humanos o híbridos humanos-máquina, del futuro.

Así, por un lado, están los retornados con sus habilidades paranormales que sirven tanto para hacer el bien como el mal y, por otro, una especie de agencia de seguridad nacional norteamericana que pretende regular y estar al tanto de las actividades de los 4,400, lo que da por resultado una serie que combina elementos de ciencia ficción en el aquí y ahora con dosis de otros géneros televisivos como el policiaco, el de aventuras, el fantástico, el de intriga, el juvenil, el de amor, el religioso, que culmina en una lucha de poder entre los diversos personajes de la trama.

La pregunta es: ¿cómo un programa con tales características no pudo captar el interés del público más allá de cuatro temporadas? Pienso, en primer lugar, que los creadores y productores de la serie se engolosinaron con la cantidad de elementos imaginativos que tenían a su alcance y, no conformes con las habilidades de 4,400 abducidos y retornados, decidieron introducir al guión una sustancia con el potencial para convertir al 50% de la población mundial el otro 50% moriría en individuos con una habilidad paranormal, lo que rompe en cierta manera con la idea de la abducción; en segundo lugar, dada la cantidad de directores que participaron en la serie, el resultado entre programa y programa fue desigual; tres: al tratar de ganar el mayor número de adeptos de diferente edad y condición social, los realizadores apostaron por fórmulas archirreconocidas, y no por una creación que de manera independiente le diera naturalidad a la serie y, por último, dada la multiplicidad de dispositivos fantasiosos hay escenas en que la teleaudiencia pierde la credibilidad de lo que ver.

Que si recomiendo Los 4,400: sí, sobre todo si a usted le interesa más la discusión ética que estética que el programa propone.