Retroceso: política reproductiva, varada

En la última década, México presentó un retroceso en materia de políticas de salud reproductiva, en particular en adolescentes, debido a falta de continuidad en los programas de educación sexual, coincidieron especialistas del las Naciones Unidas y de grupos de la sociedad civil.

En el marco de las conmemoraciones del Día Mundial de la Población, celebrado el 11 de julio, Alfonso Sandoval, representante adjunto del Fondo de Población de la ONU, indicó que en América Latina y México los programas relativos a la prevención de embarazos no deseados no tienen continuidad, lo que significa un retroceso.

En México, de acuerdo con los datos de Censo del 2010, siete de cada 10 mujeres de 15 años o más tuvieron al menos un hijo nacido vivo. Del total de mujeres de 15 a 19 años, 12.4% ha tenido descendencia, a diferencia de 57.2% de las jóvenes de 20 a 29 años de edad.

El director general adjunto de la Secretaría General del Consejo Nacional de Población (Conapo), Jesús Zimbrón, informó que para junio del 2013 se registraron 118. 4 millones de mexicanos, de los cuales, 48.8% es mujer y 51.2%, hombre. Ricardo García, del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, detalló que 20% de los nacimientos anuales en el país es de madres adolescentes, es decir, unas 400,000 menores de edad.

A partir de la llegada del expresidente Vicente Fox a la Presidencia, el tema de educación sexual en las escuelas se vio limitado y se presume que hubo una correlación entre la falta de información y el aumento de embarazos, dijo, consultada aparte, Rebeca Ramos, abogada del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE).

El investigador del Colegio de México (Colmex) Claudio Stern expuso que por primera vez, a finales de la década pasada, la tasa de embarazos en adolescentes, que venía disminuyendo desde finales de los 70 del siglo pasado, se incrementó principalmente en los sectores de clase media.

El conservadurismo, la desigualdad existente y la falta de voluntad política han sido obstáculos para realizar una mayor prevención, destacó. La pobreza en la que se encuentra más de la mitad de la población redunda en que la unión a edades tempranas y los embarazos que le suceden sigan caracterizando a la mayor parte de la población, afirmó Stern.

La falta de educación más integral sobre la sexualidad en el sistema escolar y los medios de comunicación, aunado al conservadurismo de los profesores, obstaculizan tratar estos temas.

El tema religioso ha sido en México una barrera para adoptar políticas públicas más progresistas como la píldora del día siguiente, considerada como abortiva, aseguró. Los anticonceptivos y orientación sexual son de difícil acceso para las jóvenes adolescentes en las instituciones de salud, opina el investigador. En este tono, la abogada de GIRE dijo que a pesar de que en la normativa general de salud hay una previsión que ordena brindar servicios a los adolescentes en materia de anticoncepción, en la práctica hay bastantes obstáculos para acceder. El funcionario de la ONU refirió que en Latinoamérica existe una marcada tendencia de los grupos conservadores de cuestionar la educación sexual; argumentan que no atiende a los valores.

ana.langner@eleconomista.mx