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Compra de votos, fraude que tiene que castigarse
Felipe Calderón no aparenta disgusto por la derrota de su partido (PAN) el 1 de julio, se define como seguidor de la democracia en la que se gana por uno, dos o tres votos y admite que en términos de violencia, México evidentemente no está mejor que hace seis años.
El presidente Felipe Calderón no aparenta disgusto por la derrota de su partido (PAN) el 1 de julio, se define como seguidor de la democracia en la que se gana por uno, dos o tres votos y admite que en términos de violencia, México evidentemente no está mejor que hace seis años.
Así lo difundió una entrevista publicada en la edición dominical del periódico El País. El presidente Calderón también opina que hay panistas que lamentablemente se comportan como priístas y eso explica en parte la derrota del PAN.
Dijo que el problema de la democracia está en la libertad con la que un elector vota y que la compra de voto s es un fraude que tiene que castigarse, pero eso no implica la nulidad de comicios.
No soy de los que creen que una elección se puede decidir así como así por la compra de votos.
No es un asunto de fe, es un asunto de pruebas y de decisiones judiciales (...) Si hay un voto o 10 o 1,000 que están comprados, evidentemente se anula la voluntad de esos votantes, pero que esos votos sean nulos no necesariamente implica la nulidad de un proceso electoral en el que han votado 70 millones de personas .
Tras los resultados de estos comicios, destacó que perdieron todos los panistas y el gobierno por no saber refrendar el voto ciudadano pero también la dirección del PAN porque quizá el proceso de selección de candidatos fue errático y costoso políticamente.