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Anomalías por $1,000 millones
La ASF, en la cuenta pública 2012, advirtió que el gobierno del perredista apenas llegó a 47% de la meta de transparencia en el uso de recursos federales.

El gobierno de Ángel Aguirre en Guerrero, el segundo más opaco del país en gasto federalizado, registró pagos en exceso, incumplimiento de devoluciones a la Tesorería de la Federación, falta de contratos en obra pública, infraestructura adquirida de mala calidad o vicios ocultos. Dichas anomalías detectadas en el 2012, segundo año de gobierno de Aguirre, superan los 1,000 millones de pesos, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
En una revisión hecha por El Economista a la Cuenta Pública del 2012, la última que ha realizado la ASF, se precisa que el gobierno de Guerrero apenas cumplió en 47.2% en la meta de transparencia sobre los recursos federales que se le asignaron, con lo que ocupó el segundo sitio como la entidad más opaca, sólo después de Colima, con 23.6% de cumplimiento, lo que representa una cifra marginal en comparación con Tabasco, que con 90% es la entidad más transparente de los recursos públicos, según la Auditoría.
El hecho de ser la segunda entidad más opaca del país no es poca cosa, si se toma en cuenta que la PGR investiga el desvío de recursos federales y estatales por más de 287 millones de pesos en la gestión de Aguirre, por parte de una red de lavado de dinero que encabezaba su hermano, Mateo Aguirre Rivero.
Al revisar 24,932 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (FAEB) entregado por la Federación en el 2012 al gobierno de Guerrero, la Auditoría encontró faltante de bienes adquiridos y pagos improcedentes o en exceso en la nómina magisterial estatal.
En su revisión al Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF) por 2,413 millones de pesos en el 2012, la ASF refiere que encontró asimismo pagos improcedentes o en exceso, falta de documentación comprobatoria de las erogaciones, deficiencias en el procedimiento de contratación o adjudicaciones fuera de obra.
Respecto de 76,674.72 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (Fassa), la ASF precisó que descubrió pagos improcedentes o en exceso, así como inexistencia o deficiente control en el manejo y custodia de bienes de consumo.
En el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Estatal (Fise), por 35,548.3 millones de pesos, se encontró con obra de mala calidad o con vicios ocultos, y falta de documentación comprobatoria de las erogaciones fiscales.
La ASF registró que el gobierno de Guerrero no reintegró a la Tesorería de la Federación un monto de 9,628 millones de pesos del Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM).
Cabe destacar que la investigación de la PGR identificó que Mateo Aguirre y su red de corrupción desviaba recursos de entidades federales como Comisión Federal de Electricidad, Banobras y Tesorería de la Federación, a sus cuentas bancarias personales.
La Auditoría Superior de la Federación también revisó 206,708.4 millones de pesos de recursos federales transferidos a Guerrero como parte del Seguro Popular, y localizó también pagos improcedentes o en exceso, falta de documentación fiscal, entre otras irregularidades.
Si se suman las anomalías detectadas por la ASF en el 2012 superan los 1,000 millones de pesos, tan sólo en el rubro de los recursos federales transferidos al gobierno de Ángel Aguirre, en su segundo año de gobierno.
Cabe destacar que en algunos estados, los ingresos de origen federal ascienden a más de 95.0% del total, como en Guerrero, 95.2%; Morelos, 95.1%; Oaxaca, 96.5%; Tabasco, 95.8%, y Zacatecas, 95.1 por ciento.
Muchos recursos y mucha pobreza
La ASF precisó en su estudio que a pesar de las cuantiosas transferencias de recursos federales a Guerrero -desde el 2011 y hasta el 2013-, periodo de gobierno de Ángel Aguirre, en la entidad se ubican aún cinco de los 81 municipios con los más altos niveles de rezago social y pobreza, entre ellos Atoyac, Cochoapa, Cutzamala, Chilpancingo y Pilcaya.